La Asociación Castellano Leonesa de Academias de Idiomas, ACLID, denuncia la situación cada vez más complicada a la que tienen que hacer frente por la reducción de aforo conforme al nivel de alerta por el Covid y solicita igualdad de condiciones en las restricciones dictadas por el Gobierno autonómico.
ACLID apunta a dos problemas como los cambios en la normativa en la limitación de aforo, que ha ido mermando a medida que ha dado comienzo el nuevo curso, ya que las academias comenzaron su planificación en el mes de junio, en el nivel 1 de alerta y con el 75 por ciento de aforo permitido, recuerda en un comunicado.
Sin embargo, señala que en septiembre se pasó al nivel 2, y las academias tuvieron que adaptarse a una reducción de aforo hasta el 50 por ciento. A ello, añade que con el recién anunciado nivel 4, los centros tienen ahora que rebajar el aforo hasta llegar a un tercio. “Cambiar las condiciones en la limitación de aforo supone un impacto directo en los estudiantes”, sostiene.
Aunque tienen la alternativa de una formación virtual de calidad, con los mismos profesores, horarios y materiales, muchos prefieren la clase presencial, asegura la citada asociación.
“Lo que solicitamos es que se reconozca la actividad esencial de las academias de idiomas, quedando exentas de estas restricciones de aforo, al igual que otras actividades muy similares. De esta manera, podremos continuar con nuestro objetivo de formación y apoyo a miles de personas que no pueden dejar aparcados sus estudios durante todo el año”, afirma Noni Gilbert, presidente de ACLID.
El segundo punto al que hace referencia ACLID es el horario marcado en el toque de queda, a partir de las 22.00 horas, ya que hay que tener en cuenta que muchos de los alumnos asisten a clase en los turnos de tarde. El reconocer la actividad de las academias como esencial, facilitaría el acceso a la clase presencial de miles de estudiantes en Castilla y León.
Según ACLID, el hándicap de las academias de idiomas es la planificación de grupos de clase con meses de antelación y el compromiso adquirido con sus alumnos a la hora de realizar las matrículas. Un compromiso que las academias defienden a capa y espada por la lealtad que sienten hacia sus alumnos y hacia el cumplimiento de su actividad formativa.
“Es en estos momentos difíciles en los que desde ACLID solicitamos el apoyo de las autoridades, a modo de reconocimiento, para poder continuar con nuestra actividad y que más de 8.000 estudiantes continúen con su formación”, continúa Noni Gilbert.
Las academias defienden que han realizado una "importante inversión de adaptación en tecnología, señalización, productos de higiene y formación de sus empleados". Asimismo, resaltan que que, a día de hoy, "no se ha reportado ningún caso positivo en las academias asociadas en Castilla y León, indica".
Desde ACLID, apoyan todas las medidas que garanticen la seguridad de la Comunidad, pero también reclaman "una igualdad de condiciones para que miles de estudiantes puedan continuar con su formación", concluye.