El Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Enseñanza de Castilla y León (Stecyl) reclamó este miércoles a la Consejería de Educación medidores de CO2 en todos los centros para mejorar la ventilación de las instalaciones y mascarillas auto filtrante tipo FPP2 a todos los empleados así como impedir las higiénicas y de tela entre el alumnado, al desconocerse su certificación.
En un escrito remitido a la consejera Rocío Lucas, Stecyl consideró necesaria una nueva evaluación de los riesgos laborales en los centros educativos de la Comunidad, además de valorar los riesgos psicosociales del personal al precisar que las condiciones laborales se han visto modificadas por la pandemia del COVID-19.
En este sentido, la portavoz del sindicato, Christina Fulconis, abogó por aumentar el personal de servicios para poder cumplir con los protocolos de limpieza así como la realización de cribados masivos con pruebas de antígenos y/o PCR en los centros y localidades donde exista un mayor número de casos.
En otra carta enviada al consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, Stecyl mostró la "preocupación" del colectivo de los empleados públicos que trabajan en los centros educativos antes la evolución de la pandemia los últimos días y de qué manera afecta a las condiciones laborales y a la seguridad y salud del personal.
"Durante el primer trimestre del curso la incidencia en los centros educativos ha sido menor de lo que nos temíamos. El profesorado ha trabajado incansablemente para lograr el cumplimiento de los protocolos establecidos, aumentando su carga de trabajo y su presión psicológica para mantenerse día a día de guardia con el fin de proteger su salud y seguridad y la del resto de la comunidad", precisó.