La fiebre blanquivioleta se ha extendido. A la histórica situación de vivir dos llenos en Zorrilla en apenas cinco días se ha unido la locura por conseguir una de las pocas entradas que ha puesto a disposición el Real Sporting para el encuentro de vuelta de las semifinales del playoff. Ambos clubes acordaron intercambiar el mismo número de localidades tanto en Zorrilla como en El Molinón y en ambas ciudades se han producido largas colas para tratar de hacerse con una.

En Valladolid la espera será de hasta 17 horas. Jesús llegó a las 00,00 de este jueves a la puerta de la sede de la Federación de Peñas y pronto le acompañaron su pareja, Andrea, y su padre, Manuel. Con los primeros rayos de sol la cola se fue ampliando. Nadie quiere perderse una cita apasionante, nadie quiere dejar solo al Pucela. Es imposible poner diques a la ilusión de una afición que quiere más.

Cabe recordar que solo se venderá una entrada por abonado y peñista, siempre con DNI (las localidades son nominativas).