El Real Valladolid tiene este viernes (26 de junio, 22,00 horas) un reto, volver a ganar en el Sánchez-Pizjuán. Difícil pero posible, el histórico de enfrentamientos entre Sevilla FC y el equipo blanquivioleta relata una rivalidad que comenzó en la temporada 1948-49 y que se ha prolongado, tanto en Primera como en Segunda División, a lo largo de 45 partidos ligueros en el feudo del barrio de Nervión.
Seis victorias y seis empates alumbran el bagaje pucelano en sus desplazamientos allí en la máxima categoría (en plata se ha coincidido en cuatro temporadas, todas ellas en torno a los años 70). El último precedente positivo sucedió en diciembre de 2012 cuando en el primer minuto de juego Ebert ponía en ventaja a los visitantes y Óscar en el 12' sumaba el segundo para el definitivo 1-2 que tuvo lugar.
Lo cierto es que hubo una época en la que medirse a domicilio al Sevilla era sinónimo de derrota. Durante 16 enfrentamientos consecutivos, entre 1950 y 1984, el Real Valladolid no fue capaz de puntuar ni en el antiguo estadio de Nervión ni en el actual Sánchez-Pizjuán, inaugurado en 1958. Una tendencia que cambió a partir del año 85 cuando los blanquivioletas parecieron encontrar la fórmula para sacar rédito de las visitas; si tenemos en cuenta estos últimos 30 años, de los 23 encuentros disputados allí se ha puntuado en once.
Por destacar lo bueno, el triunfo más holgado de los pucelanos en Nervión fue en la 88-89 con un 2-4 gracias al fugaz doblete de Alberto López Moreno -actual doctor de la primera plantilla-, que anotó en los minutos 65 y 66 para romper el 2-2 que hasta entonces campeaba en el marcador. También seis goles se dieron el año 94, esta vez con empate a tres, con doblete de Amavisca y gol de Alberto.