El piloto vallisoletano Roberto Carranza ha llegado a un acuerdo con el equipo francés Sodicars Racing para realizar un test en el circuito turolense de Masía Perlada. En concreto, ha probado un buggy con un motor V8 de 6.162 centímetros, una potencia de 450 caballos y tracción trasera. El otro vehículo ha sido un 4X4 motorizado por BMW con un V6 y con una potencia de 330 caballos. El test lo ha realizado junto a su copiloto, Juan Carlos Fernández, con el que ha corrido los Dakars de 2019 y 2020 y con el que ha ganado el Campeonato Nacional de Rallyes Todoterreno (T1N) en 2018 y quedado tercero en 2019.
El equipo francés cuenta con más de 15 años de experiencia en el Dakar y tiene un equipo compuesto por profesionales especializados en rally raid todoterreno. En su estructura han estado los mejores pilotos de esta especialidad. Cuenta con ocho vehículos de competición preparados ya para correr.
Durante el test, Roberto Carranza se ha sentido muy cómodo con las dos monturas, a pesar del mal tiempo con el que ha realizado los test, con mucha lluvia, agua y barro, que ha dificultado su trabajo. "Las sensaciones han sido muy buenas. Tanto Juan Carlos como yo nos hemos encontrado muy cómodos con los dos coches. El 4X4 con motor BMW, el más parecido al que usamos en el nacional, fue con el que más rápido nos adaptamos", recuerda.
Lo que más le llamó la atención fue el par motor de este 4X4, su estabilidad en las zonas rápidas y lo fácil de llevar. En cuanto al buggy 4X2 le sorprendió sus grandes dimensiones y su empuje. "Al ser motor gasolina la conducción es totalmente diferente. Más difícil de llevar al límite, pero es increíble la absorción que tiene de las irregularidades del terreno".
Carranza quiere comenzar a probar las opciones para conseguir un vehículo que le dé garantías de cara al próximo Dakar 2022, al que espera presentarse siempre que las condiciones sanitarias lo permitan. "La idea es enfocarnos en las pruebas internacionales como el Dakar y alguna del Rally TT, una de las mejores y una gran base de entrenamiento", asegura.
Para ello están poniendo a punto un Mitsubishi proto, con el que correrán algunas pruebas. "Queremos correr el próximo Dakar en un vehículo, pero no descartamos la opción de hacerlo en un SXS", afirma Carranza.
Ahora, lo más importante es que el equipo sabe que puede optar a un buen coche para el Dakar, aunque tendrán que esperar a ir cerrando nuevos patrocinadores que se quieran sumar a esta aventura.