El VRAC Quesos Entrepinares ganó hoy su duodécimo título liguero, al imponerse al Recoletas Burgos-Universidad de Burgos (UBU), que buscaba su primer título nacional en la División de Honor. Los campos del Pepe Rojo fueron los protagonistas de una final que llegó a los equipos a la prórroga y concluyó con un 40-34 , con un puntapié de castigo Carrió, que dio la victoria al equipo local.
Quien estuvo en Pepe Rojo en la Final de la División de Honor 2022/2023 no lo olvidará jamás. No se recuerda una final en el rugby español con la épica que adquirió la disputada entre el VRAC Quesos Entrepinares y el Recoletas Burgos. Si ya en Sevilla, en la Copa del Rey, ambos equipos ofrecieron un duelo de igualdad y esfuerzo, Valladolid vivió 100 minutos que ya tienen un capítulo propio en la historia del rugby nacional. Lo merecieron ambos, pero se lo llevó el VRAC frente a un Recoletas Burgos al que sin ningún tipo de duda le llegará su momento.
Y eso que el duelo comenzó con un VRAC lanzado a llevarse su título liguero número 12. No habían pasado seis minutos desde el pitido inicial de Iñaki Muñoz cuando Michael Stringer resolvió una jugada de ataque masivo del VRAC para encontrar finalmente un hueco que no aparecería en muchas ocasiones a lo largo del partido. Taibo ratificó con el pie y situó el 7-0. Si en ese momento alguien pensó que el VRAC arrollaría en la final, estaba muy confundido. Recoletas Burgos no se amilanó y armó la ofensiva para asaltar campo quesero, donde estableció su campamento. Tras un fallo de Zabalegui al intentar transformar un castigo, un discutido avant provocó una melé a favor de los burgaleses de la que Tani Bay salió con velocidad para encontrar zona de marca con cierta facilidad. Zabalegui empató con el 7-7 devolviendo al marcador una igualdad que sería la nota predominante del choque. Mientras Burgos le encontraba el punto al encuentro, el VRAC sufría con las lesiones de Sacha Casañas y Marc Sánchez que obligaban a Merino a mover el banquillo prematuramente. Carrió se erigió en protagonista con un ensayo que hacía saltar a los cerca de 1.000 aficionados desplazados desde la provincia vecina de los más de 3.000 que poblaron las grada de Pepe Rojo. Con ese 7-14 desfavorable a los de Merino se llegó al tiempo de descanso pese a los intentos en vano del Entrepinares durante el tramo final.
La segunda parte prometía emociones fuertes y obligaba al VRAC a la remontada si quería recuperar el trono de campeón liguero perdido hace un año en detrimento de la Santboiana. El equipo se conjuró en el vestuario para echar el resto durante los presumiblemente últimos 40 minutos de campeonato. La reanudación arrancó con un VRAC valiente que no tardaría en poner el 14-14 en el electrónico de Pepe Rojo. Gavidi culminaba una jugada de empuje, pero Recoletas respondía con un ensayo del eléctrico Tani Bay que no daba respiro a la alegría vallisoletana. El partido entró entonces en una fase de dominio incesante del VRAC, pero sin encontrar el premio. La defensa burgalesa, impecable y sin caer en castigos, obligaba al Quesos a buscar alternativas para remontar. No fue hasta el minuto 73 cuando Sio Moala encontró el premio a minutos y minutos de ataque sin descanso. Taibo transformaba y el marcador mostraba un 21-19 que duraría sólo unos segundos. Y es que lo que para el VRAC era un mundo, Aparejadores lo conseguía al siguiente ataque. Rocaries ensayaba y la final parecía acabada con el 21-26. Quedaban cuatro minutos y Burgos lo tenía en su mano. Pero con el VRAC enfrente nada está terminado no sólo hasta que no llega el minuto 80, sino hasta que se pita el final del partido. Y es que el minuto 80 llegó. Y el 81. Y el 82. Y el 83. Y el 84. Y el VRAC seguía sin rendirse acumulando fases, ataques y castigos a favor. Un balón, un tropiezo…el más mínimo fallo pondría el punto y final a la temporada. Pero con las fuerzas al límite, el VRAC movió y Álex Alonso irrumpió en carrera y en paralelo a la zona más fiel de la afición para ensayar (26-26). Taibo rozó la transformación, pero el oval se fue a escasos metros de los palos y la final de la División de Honor se fue a la prórroga.
Con los dos equipos rozando el agotamiento y escenas de sufrimiento, vendajes y lesiones, las aficiones se dividían entre la alegría de ver continuar el espectáculo en plena noche y el reconocimiento al esfuerzo de los 46 jugadores. Quedaban por delante dos partes de 10 minutos. Y en esos 20 minutos volvió a pasar de todo. Primero Rocaries repitió con un ensayo de los suyos, lo cual obligaba al VRAC a tirar nuevamente de épica (26-31). Pottgieter, al borde del descanso del tiempo extra, volvió a darle ventaja al Quesos de dos puntos gracias a la magnífica transformación de Taibo. Burgos, con 10 minutos por delante, estaba a un castigo de llevarse la División de Honor. Y entonces, como si de un truco de magia se tratase y con las fuerzas bajo mínimos, una carrera para la historia del VRAC de Miguel Lainz rompió el marcador con nueve puntos de ventaja para el Quesos (40-31). Pero si el Entrepinares nunca tira la toalla, Burgos tampoco lo iba a hacer con todo lo que había remado. Con tres minutos por delante, se la jugó a un castigo pasado por Carrió para quedarse a un ensayo transformado (40-34). Los minutos pasaron con Burgos apretando y apretando y en un final idéntico al de Sevilla, los de José García erraron en la última touch y el VRAC recuperó el tronó de campeón de Liga.
Ficha técnica:
40 - VRAC Quesos Entrepinares: Raúl Calzón, Pablo Miejimolle, Mauro Genco, KaloKalo Gavidi, Sacha Casañas, Marc Sánchez, George Stokes, Ewart Pottgieter, Mauro Perotti, Greg Dyer, Martiniano Cian, Baltazar Taibo, Michael Stringer, Miguel Lainz y Damián Huber
También jugaron: Benjamin Wood, Siosiua Moala, Alejandro Alonso, Juanchi Pérez, Alberto Blanco, Javier López, Gabriel Vélez y Tsotne Tchumburidze.
34 – Recoletas Burgos: Bernardo Vázquez, Agustín Gil, Santiago Gramajo, Nicolás Walker, Johan Wagenaar, Rubén Sanz, Alejandro Suárez, Valentín Bustos, Tani Bay, Tomás Carrió, Nicolás Coronel, Juan Zabalegui, Pablo Rascón, Facundo López y Fede Casteglioni
También jugaron: Ignacio Caini, Álex Silvestre, Franco Pechia, Urko Zumeta, Facu Sacovechi, Matías Núñez, Nico Rocaries y Noah Cánepa.
Parciales: 7-0, min. 6: Ensayo de Michael Stringer y transformación de Baltazar Taibo; 7-7, min. 32. Ensayo de Tani Bay y transformación de Juan Zabalegui; 7-7, min. 32: Ensayo de Tani Bay y transformación de Juan Zabalegui; 7-14, min. 35: Ensayo y transformación de Tomás Carrió; 14-14, min. 45: Ensayo de KaloKalo Gavidi y transformación de Baltazar Taibo; 14-19, min. 50: Ensayo de Tani Bay; 21-19, min. 73: Ensayo de Siosua Moala y transformación de Baltazar Taibo; 21-26, min. 76: Ensayo de Nicolás Rocaries y transformación de Tomás Carrió; 26-26, min. 80: Ensayo de Álex Alonso; 26-31, min. 88: Ensayo de Nicolás Rocaries; 33-31 Ensayo de Ewart Potgietter y transformación de Baltazar Taibo; 40-31, min. 96: Ensayo de Miguel Lainz y transformación de Baltazar Taibo; 40-34, min. 97: Puntapié de castigo de Tomás Carrió.
Árbitro: Iñaki Muñoz. Amonestó a Ignacio Caini y Noah Cánepa.
Incidencias: Partido correspondiente a la Final de la División de Honor 2022/2023.
Felicitaciones por un triunfo muy esperado
Las felicitaciones no se han hecho esperar. Desde el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, al candidato a ser el nuevo regidor, Jesús Julio Carnero: