Prueba intensa y de altibajos para el UEMC Real Valladolid Baloncesto. El conjunto de Paco García cayó por la mínima ante un Cáceres Patrimonio de la Humanidad que llevó la voz cantante de principio a fin. Los blanquivioleta llegaron a remontar 14 tantos en contra, pero no tuvieron la lucidez ni la regularidad para culminar. La prueba, la tercera en cuatro días, fue un buen test físico y con final apretado y competido para los vallisoletanos, que este fin de semana afrontan la Copa de Castilla y León.
Cargado de piernas y en el tercer partido en cuatro días, al UEMC Real Valladolid Baloncesto le costó entrar en el encuentro y sufrió el buen inicio de los extremeños. Un parcial inicial de 0-7 otorgó la iniciativa a los visitantes, quienes dejaron a los pucelanos casi cuatro minutos sin anotar. Los locales no lograban encontrar tiros fáciles y se ahogaban en las pérdidas, por lo que fueron incapaces de igualar a los verdinegros (6-11). De hecho, un parcial de 0-7 puso tierra de por medio y cargó de faltas a los vallisoletanos, obligando a Paco García a solicitar tiempo muerto, aunque el cuarto inaugural acabó con una desventaja de diez puntos (8-18).
Pero el nivel atrás subió considerablemente tras la arenga del técnico. El UEMC Real Valladolid Baloncesto enlazó varias defensas consecutivas y la entrada de Jaan Puidet, entre algodones, y Pablo Martín mejoró al equipo. Más lúcidos en ataque, los blanquivioleta apretaron la contienda (11-18), pero Cáceres Patrimonio de la Humanidad mantuvo el mando con solvencia.
El cuadro de Roberto Blanco recuperó los 10 tantos de ventaja (16-26) y Paco García continuó con las probaturas, ajustando, y apostó por dar minutos al canterano Juan Lambás. En sus primeros minutos con el primer equipo, el base aportó su desparpajo y, por si fuera poco, anotó los últimos puntos del UEMC RVB en la primera parte, la cual finalizó con ventaja visitante (25-34).
Final ajustado para seguir progresando
Tras el paso por vestuarios, Cáceres Patrimonio de la Humanidad salió como una exhalación con un parcial de 0-5 (25-39), pero ahí quedó el envite. Los de Paco García no se descompusieron y firmaron buenos minutos con Melwin Pantzar y Jaan Puidet en la dirección, quienes imprimieron el ritmo deseado para remontar, ahora sí, la desventaja. Posesión a posesión, las defensas se sucedieron y un triple del base sueco obligó a Roberto Blanco a pedir tiempo muerto (36-41).
Despertaron los foráneos ante un UEMC Real Valladolid Baloncesto notablemente mejor que en la primera parte y que se mantuvo a tiro del rival. Los blanquivioleta, sin embargo, estaban visiblemente cansados de cabeza y piernas en su tercer encuentro en cuatro días, con lo que no llegaron a culminar la remontada. El tercer periodo finalizó 44-52 y dejó todo por decidir al último asalto.
Pero, independientemente del resultado, los de Paco García volvieron a demostrar que estaban en la buena línea. Cáceres Patrimonio de la Humanidad exigió un nivel físico y competitivo que igualaron los pucelanos, con lo que, con victoria o con derrota, el test iba a ser fructífero para ambas partes. Solo le faltaban dos ingredientes para hacer que la prueba fuese completamente positiva: un final apretado para sumar minutos críticos al crecimiento del equipo y un triunfo para refrendar la evolución.
No obstante, el ritmo del partido bajó en el cuarto periodo y el agotamiento hizo mella en ambos equipos, que frenaron en seco la anotación. Los errores se sucedieron y los cacereños encontraron aire desde la larga distancia para, con dos triples, distanciarse (51-58) a falta de cuatro minutos. Un dos más uno de Kabasele tensó la cuerda del encuentro (56-61), pero el pívot africano recibió un golpe en el ojo que le obligó a retirarse al banquillo. Nada grave, pero un nuevo nombre al parte de guerra que ya incluía las bajas de Sergio de la Fuente y Mike Torres, al ‘tocado’ Jaan Puidet y a Greg Gantt, con un corte también en el ojo recibido durante el encuentro.
El UEMC, con todo y con eso, logró empatar con una canasta de Kevin Allen en la pintura, pero a falta de 30 segundos (63-63) no tuvieron la clarividencia ni el acierto para anotar la posesión clave. Los foráneos, sí, desde la línea de personal. Sumó dos puntos Cáceres Patrimonio de la Humanidad y con un solo segundo en el crono, Pantzar, que cuajó un gran partido, se dejó un tiro libre por el camino. 64-65 fue el resultado final de un partido de altibajos y con sensaciones extrañar para los blanquivioleta, pero que sirvió para sumar una nueva barra de experiencia de cara a la competición oficial.
Ficha técnica
(64) UEMC Real Valladolid Baloncesto: Melwin Pantzar (11), Romaric Belemene (0), Dominic Gilbert (9), Álex Mazaira (6), Kevin Allen (4) -quinteto inicial-. También jugaron: Greg Gantt (0), Pablo Martín (3), Jaan Puidet (11), Juan Lambás (2), Herve Kabasele (8) y Jordy Kuiper (7).
(65) Cáceres Patrimonio de la Humanidad: Dani Rodríguez (7), Kaspars Vecvagars (13), Simas Jarumbauskas (11), Kevin Bercy (7), Noah Starkey (8) -quinteto inicial-. También jugaron: Albert Lafuente (4), Willy Isani (5), Julen Olaizola (0), Juan Santos (3), Pablo Sánchez () y Carlos Toledo (5).
Parciales: 8-18, 17-16 (25-34 al descanso), 19-18 (44-52) y 20-13 (64-65 final).
Incidencias: Partido de pretemporada disputado en Pabellón Municipal de Boecillo el martes 20 de septiembre de 2022.