El Caja Rural Aula Valladolid tiene una salida vital para sus intereses. Las de Miguel Ángel Peñas viajan mañana a Porriño para jugar un partido importantísimo en una pista que siempre ha dado dolor de cabeza a las blanquiazules. Tras la Copa de la Reina, a las vallsisoletanas les quedan cuatro partidos por delante y un solo objetivo, asegurar el octavo puesto y tratar de escalar en la clasificación.
“Vamos a Porriño, que es una cancha que está maldita para nosotros. Históricamente siempre nos ha resultado muy difícil sacar algo positivo de allí, así que espermos que este año consigamos hacer un buen partido. Los viajes a Galicia siempre se nos hacen muy duros y nos complican los partidos”, ha asegurado un Miguel Ángel Peñas que tiene a todas las jugadoras disponibles para mañana. Y que señala que la victoria tiene que pasar por subir la intensidad defensiva.
Las gallegas, que son las rivales directas por ese preciado octavo puesto que da acceso automático a la segunda fase de la Copa de la Reina de la temporada 2022-2023, vienen de ganar tres de sus últimos cuatro partidos y se han mostrado muy firmes en su pista desde el comienzo de la temporada.
“Tenemos que mejorar el nivel defensivo porque en los últimos partidos hemos tenido problemas en este apartado. No estamos consiguiendo defender como deberíamos. Y lo necesitamos para sacar el partido adelante. Estos encuentros que quedan son vitales para nosotros porque tenemos que intentar escalar algún puesto en la clasificación para tener un digno final y poder entrar con tranquilidad entre los ocho primeros”, ha señalado el técnico vallisoletano.
Con solo un mes de competición por delante, las blanquiazules solo piensan en firmar el máximo número de victorias posiblies antes de que la temporada 2021-2022 llegue a su fin. Tras el encuentro ante el Balonmano Porriño, las de Miguel Ángel Peñas recibirán en casa al Balonmano Elche para viajar viajar luego hasta Granollers y cerrar la Liga Guerreras Iberdrola en Huerta del Rey frente al Balonmano Zuazo.