Otro expediente para el Real Valladolid. La Federación de Fútbol, que vive sus horas más bajas por el escándalo protagonizado por su presidente Luis Rubiales, ha encontrado en el club blanquivioleta su blanco fácil. Si hace unas semanas el perjudicado fue el técnico Paulo Pezzolano, ahora le ha tocado al director del gabinete de Presidencia blanquivioleta, David Espinar, mano derecha de Ronaldo Nazario.
En esta ocasión, la RFEF le abre un procedimiento disciplinario extraordinario por un artículo publicado en LinkedIn. Sí, en la red social de trabajo, que parece que también está controlada por el organismo nacional. Así lo ha comunicado el propio protagonista en esa red social, que lo ha ilustrado con su publicación. En concreto el comunicado oficial que hizo el Real Valladolid con un encabezado que decía “Turkmenistán, Corea del Norte, Eritrea y el fútbol español. Atentados reglamentados contra la libertad de expresión”.
La sanción se apuntala en el artículo 106 del Código Disciplinario, que dice: "La realización por parte de cualquier persona sujeta a disciplina deportiva de declaraciones a través de cualquier medio mediante las que se cuestione la honradez e imparcialidad de cualquier miembro del colectivo arbitral o de los órganos de la RFEF". Y parece que la red social LinkedIn también lo es.