Un penalti ha tenido la culpa. El Real Valladolid regresa a casa con una nueva derrota, esta vez, contra el CA Osasuna. Un rival fuerte que, además, jugaba en casa.
No obstante, no se puede decir que los blanquivioletas no lo han dado todo en el terreno de juego, pues lo cierto es que han peleado hasta el último minuto en busca de ese gol que le llevase al menos al empate, aunque sin éxito.
El partido en El Sadar ha comenzado con una clara ventaja para los pamploneses, que han conseguido transformar el marcador en el minuto 19 gracias a un penalti por una acción de Luis Pérez sobre Budimir y tras la intervención del VAR.
Pese a ello, con el 1-0 los de Pezzolano sí han logrado pisar más campo rival, aunque tan solo ha llevado la tensión a la grada en una ocasión, con un disparo de Amallah que ha puesto a prueba a Sergio Herrera.
Por su parte, el conjunto rojillo ha salido al campo con fuerza y decisión, consiguiendo poner nervioso aún Real Valladolid que, contra todo pronóstico, no ha perdido la esperanza, pese a que antes del penalti ya ha habido un momento de peligro que ha tenido, durante unos instantes, en un sinvivir a los aficionados del conjunto blanquivioleta.
Ha sido tras una petición de falta por parte de Amallah cuando los locales han recuperado el balón y, tras ello, Bryan Zaragoza ha tirado un remate que apuntaba maneras a terminar en gol. Pero ahí estaba Karl Hein para salvarlo.
Tras el gol, el Osasuna ha continuado con su plan, consiguiendo llegar a la portería contraria en más de una ocasión. ¿La más peligrosa? Con un cabezazo de Juan Cruz que, finalmente, ha terminado en manos de Hein y que, al parecer, ha hecho reaccionar al Pucela en un tramo final del primer tiempo marcado por un equilibrio de fuerzas.
La polémica ha llegado antes del descanso, cuando Anuar no ha podido rematar un nuevo centro de Moro por estar agarrado por Boyomo. El blanquivioleta ha pedido penalti, pero le ha sido denegado.
La respuesta del equipo local ha sido un último golpe por parte de Aimar Oroz que ha terminado fuera de la meta.
La segunda parte ha estado marcada por dos grandes ocasiones para los pamploneses en las que ni Budimir ni Bryan Zaragoza han encontrado portería.
Tras analizar el panorama, Pezzolano ha optado por mover ficha con el fin de lograr el empate. Sí ha conseguido más presencial del balón para los vallisoletanos, que han aumentado el ritmo, pero sin llegar a marcar el gol deseado.
Este ha podido llegar en el minuto 90 con un disparo de Kike Pérez, pero ya estaba ahí Catena para salvarlo. Entonces, un Osasuna dispuesto a defender el 1-0, se ha crecido ante un Pucela que, pese a los esfuerzos realizados, no ha sido capaz de igualar el marcador, pese a las múltiples opciones que ha tenido hasta el último segundo.
Ha acabado así una visita que no prometía nada sencilla y que ha hundido aún más a un conjunto blanquivioleta que no logra remontar.
Una nueva ocasión tendrá el próximo domingo, 10 de noviembre, cuando recibirá al Athletic Club en el José Zorrilla a partir de las 18:30 horas.