La economía de la Comunidad crece pero registra una desaceleración

Así lo ha anunciado la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, en la presentación de la primera estimación de la evolución de la economía de Castilla y León en 2016 que, según ha recordado, se revisará cuando haya datos menos coyunturales y más estructurales. "Todo el mundo revisa la contabilidad", ha recordado Del Olmo para quien la economía de Castilla y León se comportó "muy bien" en un año en el que España fue "la locomotora" de Europa --el crecimiento de la zona euro fue del 1,7 por ciento y el de la UE del 1,8 por ciento--.

Según ha constatado Del Olmo, a pesar de que Castilla y León creció el pasado año por encima de lo previsto --la Junta estimó el incremento de 2016 en un 2,7 por ciento-- sí se ha registrado una "progresiva desaceleración" a lo largo de los cuatro trimestres del año en los que se ha pasado de un crecimiento inicial del 3,5 por ciento a un 3,4, 3,0 y 2,9 por ciento con el que concluyó el último trimestre.

"Hay una desaceleración de seis décimas, pero mucho menos de lo previsto inicialmente", ha precisado la consejera, quien ha reiterado la dificultad que supone pronosticar la evolución de algunos sectores de mayor pujanza en Castilla y León, como es el caso del sector primario, a lo que ha añadido el repunte del sector extractivo que concluyó el año "mejor de lo previsto" ya que se quemó y se extrajo carbón autóctono.

Preguntada por la estimación para 2017, ha aclarado que nada hace pensar que el crecimiento del PIB vaya a ser inferior al 2,5 por ciento pronosticado inicialmente, si bien ha evidenciado las "muchas incertidumbres" de las que depende la economía regional, como el Brexit, los efectos de la presidencia de Donald Trump, la evolución de los tipos de interés o el precio del petróleo o de las materias primas.

"No se va a apartar mucho de lo que ocurra en España", ha considerado Del Olmo, quien ha rechazado que el año de gobierno en funciones haya tenido consecuencias negativas para la evolución de la economía regional ya que, incluso, creció por encima del ejercicio de 2015, a lo que ha añadido la aceleración del gasto de las administraciones públicas incluso en un año en el que no se ha elaborado el próximo presupuesto y que cerró el ejercicio en octubre.

Por otro lado, en su análisis de la evolución de la economía en 2016, Del Olmo ha cifrado en 30.913 los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo creados en el último año, una cantidad "bastante considerable" que ha relacionado con los datos de la EPA, si bien no ha dudado al afirmar que queda mucho trabajo por hacer para superar la tasa media de paro del 15,8 por ciento (dos puntos mejor a lo estimado).

Perspectiva de la oferta

Según ha detallado, el sector primario aumentó el pasado año un 5,8 por ciento, frente al 3,1 por ciento de 2015, con un especial incremento en la producción agraria y un menor crecimiento de la ganadera. Por su parte, la industria anotó una variación anual del 4,3 por ciento, más elevada que la de 2015 (2,9 por ciento), donde las ramas manufactureras se aceleraron hasta alcanzar el 5,2 por ciento mientras las energéticas registraron un descenso del 1,9 por ciento, inferior al de 2015.

Las ramas que más contribuyeron a este mayor crecimiento de la industria manufacturera fueron las alimentarias y la de material de transporte, los dos sectores más importantes de este sector de la economía de Castilla y León.

Sin embargo, en 2016 la construcción creció el 1,7 por ciento, variación inferior a la de 2015 (3,1 por ciento) donde la edificación residencial cayó en menor medida que el año anterior mientras que
la edificación no residencial se desaceleró y la obra civil descendió en contraste con el aumento del ejercicio precedente.

Por otra parte, el conjunto del sector servicios se incrementó el 2,9 por ciento, igual que en 2015, como resultado del mejor comportamiento de los servicios de mercado, que pasaron del 3,1 por ciento al 3,5 por ciento en 2016, y de una desaceleración de los servicios no de mercado (1 por ciento y 2,4 por ciento, respectivamente).

Desde el punto de vista de la demanda, Del Olmo ha explicado la mejor evolución del PIB en 2016 en la mayor contribución positiva de la demanda interna (3,3 puntos porcentuales, frente a 2,4 en el año anterior) mientras que el sector exterior aportó -0,1 puntos porcentuales (0,6 puntos en 2015), en un año "récord" para las exportaciones de Castilla y León, ha recordado la consejera.

"Es por el juego de las importaciones y de las exportaciones", ha explicado Del Olmo, quien ha cifrado en un 2,3 y en un 2,4 por ciento las variaciones de las exportaciones y de las importaciones.

Por su parte, el gasto en consumo final creció el 3,4 por ciento (2,6 por ciento en 2015) con un 3,6 por ciento más para el gasto en consumo final de los hogares (3,4 por ciento el año anterior) mientras que el gasto en consumo final de las Administraciones Públicas pasó del 0 por ciento en 2015 al 2,7 por ciento en 2016.

En cuanto a la formación bruta de capital o inversión, se elevó el 2,5 por ciento, algo menos que en 2015 (2,9 por ciento). En concreto, la formación bruta de capital fijo aumentó el 2,5 por ciento en 2016, una décima menos que el año anterior mientras que la inversión en bienes de equipo creció el 4,6 por ciento (9,4 por ciento en 2015), mientras que la inversión en construcción registró también un incremento inferior al del año precedente (1,2 por ciento y 2,3 por ciento, respectivamente).

Por su parte, la variación de existencias mantuvo un efecto neutro sobre el crecimiento del PIB, "al igual que en 2015".

Cuarto trimestre

Por otro lado, los datos de la Contabilidad Regional Trimestral sitúan en un 2,9 por ciento el crecimiento interanual del Producto Interior Bruto (PIB) de Castilla y León en el cuarto trimestre de 2016, una décima menos que el anterior, con una variación intertrimestral que pasó del 0,3 por ciento al 0,5 por ciento en este periodo.

Desde la perspectiva de la oferta entre octubre y diciembre de 2016 se produjo un mayor crecimiento del Valor Añadido Bruto de todos los sectores, excepto el de servicios. En concreto, el sector primario creció un 6,2 por ciento, frente a un 5,4 por ciento del periodo anterior.

Según los datos aportados por Del Olmo, en el último avance disponible de producción de cultivos de la campaña 2015/2016 correspondiente a diciembre de 2016 se refleja una subida de la producción agrícola "muy superior" a la de la campaña anterior.

El sector ganadero contabilizó un descenso de la producción inferior al del trimestre precedente y el sector de la construcción se aceleró en el cuarto trimestre al pasar del 1,7 por ciento al 2,3 por ciento, "debido a la mayor actividad de la edificación y de la obra civil".

La industria creció un 3,3 por ciento en este periodo concreto, más del doble que en el tercer trimestre de 2015 (1,5 por ciento) por un aumento de las ramas energéticas (8,7 por ciento por el aumento del suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado así como de las ramas extractivas) y una desaceleración de las manufactureras que crecieron un 2,5 por ciento (3,3 por ciento en el anterior) por una menor aportación de las ramas de material de transporte y por la contribución negativa de otras como las alimentarias y madera y corcho.

Por último, el VAB del conjunto del sector servicios anotó un menor aumento respecto del anterior periodo (2,7 por ciento y 3,4 por ciento, respectivamente), como consecuencia de un descenso en el componente de no mercado.