UGT y CCOO da «prácticamente por cerrado» el texto del acuerdo del Diálogo Social, a falta de «apreciaciones puntuales», y creen que en cuestión de una semana o algo más de tiempo podría culminarse para su firma próximamente.
Así lo han afirmado el secretario general de CCOO en Castilla y León, Vicente Andrés, y el vicesecretario autonómico de UGT, Evelio Angulo, en el marco de unas jornadas sobre la Cátedra de Sindicalismo y Diálogo Social que se desarrollan durante esta semana en Valladolid y después de haber mantenido una reunión este lunes en el marco del Diálogo Social.
En este contexto, Vicente Andrés ha señalado que el acuerdo se puede dar en una semana «como en 20 días», ya que depende de la «intensidad» y la «velocidad» que le «metan», pero sobre todo la «resistencia» del Gobierno, que no ha cedido en algunas cosas, aunque podría hacerlo en la próxima reunión, fijada para el miércoles, algo que si ocurre «el acuerdo es inminente».
«Si la Junta se resiste requerirá dos, tres o cuatro reuniones más, entonces se puede alargar, está lo suficiente maduro para que el gobierno definitivamente ceda a las reivindicaciones que tiene, en la parte final», ha añadido Andrés.
Por su parte, Evelio Angulo ha incidido en que el Diálogo Social no es «tarea fácil», que «no está exenta de dificultades», que considera que son más o menos las mismas que otros años, pero ha asegurado que se está «en la recta final».
Angulo ha aclarado que en la fase final siempre hay «tensión» tanto en las intervenciones como en las palabras que se pueden emplear en un determinado momento, «que pueden no ser las adecuadas», pero cree que están en la «normalidad» de la gestión del Diálogo Social y además ha señalado el interés en llegar a acuerdos para evitar que se «contaminen» las elecciones sindicales en la Función Pública.
En cuanto a la influencia de las discrepancias con el Ejecutivo autonómico derivadas del incumplimiento de la implantación de la jornada de 35 horas, Vicente Andrés considera que el no cumplimiento de los acuerdos firmados «no ayuda a engrasar el proceso de negociación», pero la mismo tiempo ha aclarado que «no es un condicionante» para la negociación.
ÁMBITOS DISTINTOS
A este respecto, ha explicado que son dos aspectos «claramente diferenciados», uno ligado a las relaciones laborales del Gobierno como empresa con sus trabajadores y otra al Ejecutivo con los sindicatos en el ámbito general de la ciudadanía.
«Lógicamente al ser los dos sindicatos estar presentes en los dos ámbitos, siempre interfiere de alguna manera porque se va con cierta desconfianza en relación a que se puedan o no cumplir los acuerdos», ha añadido Vicente Andrés, quien también ha aclarado que la responsabilidad que los sindicatos tienen sobre el Diálogo Social no lo pueden «eludir».
En esta línea, ha apuntado que lo que está en juego en el proceso del Diálogo Social son «muchos empleos, muchos avances para los trabajadores, muchas políticas de empleo» que para ellos les hace que sea necesario avanzar en el acuerdo, que está próximo.
«Hasta el rabo todo es toro, como decimos en las negociaciones cuando no están cerradas», ha aseverado el responsable de CCOO, quien cree que «se avanza adecuadamente» y es posible que en las próximas fechas se produzca el acuerdo porque se han cerrado muchas cuestiones, aunque ha incidido en que, por ejemplo, el Plan Anual de Políticas de Empleo tiene 90 líneas que se revisan una a una y hay cosas que se atascan otras que se resuelven.
Aún así, ha reiterado que están en la recta final y tienen interés en que haya acuerdo pronto, más en un «periodo de crispación» en Castilla y León, aunque en el conjunto del Estado se recupera el Diálogo Social, que considera que puede ser «buen antídoto» para rebajar la tensión.
Vicente Andrés ha añadido que en Castilla y León son necesarios los acuerdos para «encauzar una senda de normalización y para rebajar la tensión» y creen que puede contribuir a avanzar en determinadas políticas.
Aún así, ha advertido de que el Diálogo Social «no es todo» y después habrá que entrar en otros campos como los desequilibrios en Castilla y León, la situación de León o el cierre de la minería y las térmicas, que son problemas que también tiene la Comunidad y se abordarán «a renglón seguido».