Los precios industriales en Castilla y León bajaron un 0,8 por ciento en febrero en relación al mes anterior, frente a un descenso del 1,2 por ciento en España, y retrocedieron un 2,3 por ciento en tasa interanual, una décima más en este caso respecto al resto de país que con un -2,2 por ciento ahonda más de un punto la caída que habían experimentado en enero (-0,9 por ciento), según ha informado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Castilla y León es una de las catorce comunidades autónomas en las que ha disminuido la tasa anual del IPRI, al pasar de un -2,1 por ciento a un -2,3 por ciento. Las mayores bajadas se han producido en Andalucía, País Vasco y Región de Murcia, cuyas tasas han descendido 3,2, 3,2 y 2,9 puntos, respectivamente. Por su parte, Cantabria, Aragón y Extremadura son las comunidades donde ha aumentado la tasa, con subidas de 0,7, 0,1 y 0,1 puntos, respectivamente.
El mayor descenso de los precios industriales se ha producido en la partida de energía, con un 4,2 por ciento menos, seguida de los bienes intermedios (-0,2 por ciento) y de los bienes de equipo (-0,1 por ciento) mientras que han subido los precios de los bienes de consumo (0,2 por ciento).
En comparación con febrero de 2019 el mayor descenso de los precios industriales se ha registrado también en la partida de energía, con un -12,2 por ciento, seguida de los bienes intermedios (-2,8 por ciento), con aumentos en el resto: bienes de equipo (2,7 por ciento) y bienes de consumo (1,9 por ciento).
Con este recorte interanual, los precios industriales encadenan nueve meses consecutivos en tasas negativas después de haber estado 32 meses en positivo.
La aceleración en el descenso interanual de los precios industriales de febrero se ha debido principalmente al recorte en más de 3,5 puntos de la tasa de energía, hasta el -8%, por el abaratamiento del refino de petróleo y de la producción de gas, y al retroceso de la tasa de los bienes intermedios en cinco décimas, hasta el -1,4%.