El total afiliados que estaba en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por una suspensión total o parcial a 30 de septiembre era de 728.909 personas en España de los que 20.422 son afiliados de Castilla y León, frente a los 28.722 de agosto, los 38.809 de julio, los 72.362 de junio, los 122.773 de mayo y los 145.505 de abril, según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones publicados este viernes.
De ellos, 605.861 se encontraban en situación de ERTE por fuerza mayor, en el caso concreto de Castilla y León la cifra es de 16.738 afiliados (63.464 en junio, 32.999 en julio y 23.870 en agosto), de ellos 9.685 hombres y 12.039 mujeres. El resto de los ERTE, 3.684, responde a otras causas, cifra inferior en este caso a la computada en agosto (4.852), julio (5.810), junio (8.898), en mayo (14.767) y en abril (13.298).
Por provincias, de los 20.422 afectados por ERTE, 5.196 están afiliados en Valladolid, 3.603 en Salamanca, 3.287 en León, 3.081 en Burgos, 1.272 en Segovia, 1.204 en Ávila, 1.172 en Palencia, 987 en Zamora y 620 en Soria.
En el caso de los expedientes por fuerza mayor la mayor parte se registra también en Valladolid, con 4.239, seguida de Salamanca (3.090), León (2.882), Burgos (2.339), Segovia (1.086), Palencia (963), Ávila (820), Zamora (820) y Soria (499).
Según los datos que aporta el Ministerio, Castilla y León es la séptima comunidad autónoma con mayor porcentaje de salida de un ERTE y alcanza en concreto el 84,55 por ciento.
El mayor porcentaje de salidas de un ERTE se han producido en Navarra (88,16 por ciento), Cantabria (86,63 por ciento), Murcia (85,84 por ciento), Galicia (84,88 por ciento), La Rioja (84,72 por ciento) y Extremadura (84,58 por ciento). También han abandonado esta situación por encima del 80 por ciento en Castilla y León (84,55 por ciento), Castilla-La Mancha (83,36 por ciento), Aragón (83,18 por ciento), Asturias (82,69 por ciento), País Vasco (81,85 por ciento), Andalucía (80,90 por ciento) y C. Valenciana (80,49 por ciento).
Por el contrario, en Islas Baleares, con 48,83 por ciento de los trabajadores, y, en Canarias, con el 62,34 por ciento, han sido los lugares donde menos trabajadores han salido de ERTE.
Al cierre del mes de septiembre había 728.909 personas incluidas en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), lo que representa 83.529 personas menos que un mes antes. Este comportamiento implica un retroceso de un 80,29% menos de trabajadores en ERTE por Fuerza Mayor (605.861) y un 67,83% menos en el caso de ERTE no Fuerza Mayor (123.048) respecto a los máximos registrados el 30 de abril. De esta forma, al cierre de septiembre, tres de cada cuatro personas incluidas en ERTE durante la pandemia han salido de esta situación.
Por comunidades autónomas, la reducción de los trabajadores en situación de ERTE ha sido heterogénea desde el 30 de abril, con una media del 76,29% en el conjunto del Estado.