La Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León ha exigido a la Junta que, "de una vez por todas", comience a aportar soluciones "concretas" y que se hagan en forma de "compensaciones económicas" ante la situación "angustiosa" para multitud de empresarios del sector.
A través de un comunicado remitido a Europa Press, la Confederación ha reconocido que la comparecencia del vicepresidente y portavoz, Franciso Igea, y de la consejera de Sanidad, Verónica Casado, tras la reunión del Consejo de Gobierno de la Junta, ha vuelto a poner de manifiesto la "escasez" de recursos que tiene el Ejecutivo autonómico a la hora de adoptar medidas para frenar la transmisión del COVID-19.
Además, para la confederación, la decisión adoptada el miércoles por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en la que otorgaba plena potestad a las Comunidades Autónomas para que la que lo considerada conveniente endureciera las medidas restrictivas, les ha hecho ponerse en lo "peor". "Se volvió a poner de manifiesto la estrategia del Gobierno Central de intentar no desgastar su imagen otorgando la decisión a cada Comunidad Autónoma, de tal manera que nos vamos a encontrar con 17 formas distintas de celebrar las fiestas navideñas, algo gravoso, dañino, costoso, inexplicable y, sobre todo, determinante a la hora de buscar soluciones para paliar la crisis económica que está viviendo el sector", lamenta.
El mes de diciembre, continúan, ha sido siempre un mes referente en la facturación de los negocios del sector, pero las medidas restrictivas que están sufriendo suponen un "varapalo" para las economías de los hosteleros que ya están "bastante dañadas" desde el inicio de la pandemia.
"Las justificaciones que una y otra vez esgrime el vicepresidente de la Junta se nos antojan ya reiterativas y carentes de toda razón, ya que cada vez se restringe más la actividad hostelera, mientras los contagios, ingresos en UCI y hospitalizaciones continúan aumentando", argumenta.
En este punto, señala que la Confederación se encuentran en la disyuntiva de que, o los datos "no son correctos", o en el caso de que lo sean, "la hostelería no puede ser la causante después de haber estado más de un mes cerrada". "En cualquier caso, tenemos ya que exigir de una vez por todas, que comiencen a aportar soluciones de una manera concreta, que se haga en forma de compensaciones económicas, que se ponga sobre la mesa una situación que comienza a ser angustiosa para multitud de empresarios de este sector", incide.
De ahí que muestren su "perplejidad" cuando se cierran los bares, donde los empresarios controlan los aforos, la distancia de seguridad y aplican "escrupulosamente" las medidas de higiene. "Mientras vemos auténticas mareas de gente que pasean por las calles de las ciudades realizando compras o viendo la iluminación navideña, o se ve el transporte público repleto de usuarios, y ni tan siquiera se establece la duda de que esas situaciones puedan ser focos de contagios", apunta.
En este sentido, las soluciones, "a juicio del señor Igea", pasan por cerrar sus negocios. "Debemos de obligarle a que las soluciones de nuestros negocios pasen por recibir de una vez por todas esas ayudas económicas prometidas por el Gobierno central y por el Gobierno regional, y que no han llegado de ninguna manera desde que se inició la pandemia", insiste.
Además, la confederación recuerda que tras las declaraciones por parte del portavoz de la Junta de asumir el 35 por ciento del importe de la ayuda necesaria, se ha presentado, según señalan, con un importe de media de 2.500 euros por empresa, lo que supone, a juicio de los hosteleros, el "desconocimiento" de las necesidades del sector y "no transmitir" la realidad a la opinión pública, ya que serán menos del 40 por ciento de las empresas de Castilla y León las que podrán acceder a ellas.
"Además es injusta dicha ayuda ya que excluyen a una parte de la hostelería, como es el Ocio Nocturno, tan perjudicada con su cierre total y al alojamiento turístico, tan perjudicado con las medias de movilidad no se les da un tratamiento específico", ahonda.
La confederación recuerda que desde el 14 de marzo hasta el 25 de mayo la hostelería estuvo cerrada; que desde ese día trabajó con "infinidad" de restricciones mientras que el ocio nocturno estuvo cerrado hasta el 5 de noviembre, para luego volver a estar clausurados hasta el 11 de diciembre y desde esa fecha hasta el día de hoy se les ha vuelto a recortar el horario de trabajo.
"Desde las Administraciones se debería de entender que sin ingresar no se puede pagar, y aunque son las propias Administraciones las que nos obligan al cierre, ninguna de ellas se aparta de recaudar los ingresos en forma de impuestos con el que contribuye nuestro sector. IAE, IRPF, IVA, IBI, Autónomos, Seguridad Social de los Trabajadores, Impuesto de Sociedades..., son algunos de los Impuestos a los que sigue haciendo frente este sector, que ya se está cansando de pagar sin recibir y de ser el malo de esta triste película.Estas Navidades, más que nunca, deseamos un próspero y feliz Año Nuevo, y que el 2021 nos traiga las ayudas y el fin de las restricciones para poder sacar adelante nuestros negocios y nuestras familias", concluye.