La Junta reitera al Gobierno que reconsidere la distribución de fondos REACT-EU para evitar el "perjuicio" para CyL
El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, ha reiterado la importancia de que se reconsideren los criterios planteados por el Gobierno de España en el reparto a las comunidades autónomas de los 10.000 millones de euros de los Fondos REACT-EU correspondientes a los Fondos de la Nueva Generación Europea, para evitar el "perjuicio" que supone para Castilla y León.
Así lo ha indicado el consejero, que ha participado en la constitución de la Conferencia Sectorial del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en la que se han marcado las pautas para su desarrollo y los objetivos de trabajo de cara a la programación, gestión y ejecución de las actuaciones financiables con fondos europeos.
"Nosotros desearíamos que el órgano se hubiera convocado antes del reparto para debatir y participar", ha aseverado el consejero, quien pide, por tanto, que esos 10.000 millones se lleven al Consejo de Política Fiscal y Financiera, que se de información a las comunidades autónomas para que estas puedan opinar y que haya "un verdadero proceso de participación y diálogo en torno a estos fondos" para evitar que el reparto de loo mismos corresponda a una "decisión unilateral del Gobierno".
Fernández Carriedo ha insistido en que la Comunidad es "la más perjudicada" en el reparto, ya que únicamente se le asignan 335 millones de euros de los 10.000 millones distribuidos entre las comunidades autónomas, además de que se ha hecho de forma "unilateral", sin contar con las Comunidades Autónomas y sin convocar el Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Asimismo, tal y como hiciera en la carta que remitió a principios de mes a la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, el consejero de Economía y Hacienda ha subrayado que desde la Junta "no se comparte el cálculo" del Gobierno, pues recibir un 3,35 por ciento del total del reparto autonómico es una cifra "muy inferior" a lo que Castilla y León representa en el conjunto de España: el 18,6 por ciento de la superficie y el 5,1 por ciento de la población.
Por ello, desde la Junta se considera que la distribución de los fondos "perjudica a las comunidades autónomas que están acertando en sus políticas para combatir la recesión, como es el caso de Castilla y León, que ha logrado reducir el impacto de la crisis en términos de PIB y empleo en comparación con la media española".
Fernández Carriedo, que ha remarcado la importancia de estos recursos en el contexto de lucha contra la crisis causada por la pandemia del COVID-19 --especialmente por los mayores costes en la prestación de los servicios públicos en los territorios con elevada dispersión, superficie y envejecimiento--, ha añadido que la distribución de los Fondos REACT-EU "perjudica de forma especial a las comunidades con problemas demográficos".
Los Fondos de Nueva Generación de la Unión Europea (NextGeneration EU) son un mecanismo financiero específico dotado con 750.000 millones de euros para hacer frente a los desafíos planteados por la pandemia COVID-19. Estos fondos cuentan con varios mecanismos, entre los que se encuentra el REACT-EU, que tiene una asignación de 47.500 millones de euros para todos los socios de la Unión Europea.
Del fondo REACT-EU, 10.000 millones son distribuidos entre las comunidades, de los cuales el Ministerio de Hacienda ha asignado tan solo 335 millones a Castilla y León, un 3,35 por ciento del total del reparto autonómico.