Iberdrola aspira a movilizar más de 21.000 millones de euros en inversiones con una cartera de 150 proyectos presentada al Gobierno que aspira a los fondos europeos del Next Generation EU.

En concreto, estos proyectos están relacionados con la electrificación del calor, 'offshore' flotante, la movilidad sostenible, el hidrógeno verde, iniciativas en renovables innovadoras, redes inteligentes, economía circular o almacenamiento energético, informaron a Europa Press en fuentes de la energética.

El grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán promueve, con más de 200 pequeñas y medianas empresas, instituciones, socios tecnológicos, 'startups' y a toda la cadena de valor, esta cartera total de proyectos con impacto en todo el territorio, según adelanta este lunes el diario 'El País'.

Así, los proyectos tendrán impacto en la competitividad del tejido industrial español y permitirán la recuperación en verde a corto plazo y, a medio y largo plazo, la transformación del país orientándolo hacia sectores de futuro.

Los planes del Gobierno vertebran la colaboración público-privada como fundamental para el reparto de los fondos europeos con un objetivo de cubrir con dinero público entre el 25% y 30% de la inversión total, mientras que el 75% o 70% restantes en los proyectos se movilizaría por la empresa privada. Así, Iberdrola aspiraría para esta cartera de proyectos a entre unos 5.000 y 7.000 millones de euros de dinero de los fondos.

Las iniciativas, lideradas por agentes con capacidad de arrastre y de gestión, se desarrollarán de forma colaborativa, implicando a pequeñas y medianas empresas y ecosistema e involucrando a los eslabones de la cadena de valor industrial en todas las comunidades autónomas. Los desarrollos contribuirán al binomio transición verde y digital, establecido por la Unión Europea y alineado con el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España.

PRESENTADAS AL GOBIERNO EN LAS MANIFESTACIONES DE INTERÉS.

Esta cartera de proyectos han sido presentados por Iberdrola al Ejecutivo dentro de las manifestaciones de interés ('call of interest') que ha ido lanzando el Gobierno español desde finales del año pasado con el fin de identificar áreas de interés dentro del Programa de Impulso de proyectos tractores de Competitividad y Sostenibilidad Industrial.

Concretamente, estas actuaciones se plantean como proyectos tractores con efectos a largo plazo; realizados de forma cooperativa, involucrando a todos o casi todos los eslabones de la cadena de valor industrial en la que tenga intención de insertarse; con un marcado carácter innovador, que aporte valor añadido en términos de I+D; con un carácter vertebrador del territorio, así como con implicación de pymes.

También estos proyectos que aspiren a estos fondos europeos deben tener un impacto significativo en la competitividad y contribuir a la doble transición verde y digital, establecidos por la Unión Europea.

En total, se han publicado nueve manifestaciones de interés por el Gobierno de España, de las cuales cuatro ya están cerradas, que van desde el hidrógeno verde, a la movilidad eléctrica, las energías renovables, el reto demográfico y la lucha contra la despoblación o proyectos estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE), entre otras.

En esta línea, Iberdrola ya anunció una alianza con Fertiberia para impulsar hidrógeno verde con un plan para desarrollar proyectos por 800 megavatios (MW) de esta tecnología, cuya inversión total ascendería a 1.800 millones de euros en los próximos siete años, vinculado, eso sí, a captar estos fondos europeos para la recuperación.

YA CUENTA CON UN PLAN INVERSOR DE 14.300 MILLONES A 2025 EN ESPAÑA

Adicionalmente, la energética ya despliega un plan inversor de 14.300 millones de euros a 2025 en España, con más de 7.000 millones de euros destinados al desarrollo de renovables y otros más de 4.500 millones a redes eléctricas.

Este plan esta enmarcado en una estrategia de crecimiento que llevará a Iberdrola a invertir la cifra récord de 75.000 millones de euros en el mundo hasta 2025, con el objetivo de duplicar su capacidad renovable y aprovechar las oportunidades de la revolución energética que afrontan las principales economías.