La Asociación de Hoteles de Castilla y León acusa a la Junta de ejercer un papel de mera "observadora" en lugar de dar respuestas al sector que permitan afrontar la grave situación por la que atraviesa y despejar las dudas sobre las próximas fechas veraniegas.
El colectivo ha mantenido una reunión con el consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, "ante la indiferencia, inacción y total abandono" que está padeciendo, de forma global, el sector turístico por parte de la Administración regional y, en particular, por parte de su Consejería.
En ese encuentro, los representantes de la asociación han sido informados de que el Gobierno regional no va a dar ayudas directas al sector para paliar la situación de inactividad; no se pueden hacer previsiones de qué va a suceder el 9 de mayo; no se sabe si van a decaer los cierres territoriales, el toque de queda o las restricciones en la restauración; no se sabe si se va a poder avanzar en alivio de restricciones; no se pueden planificar aperturas de negocios; no se sabe si se va a poder trabajar.
"Entendemos que la autoridad sanitaria se dedique exclusivamente a la crisis sanitaria y trate de paliar sus consecuencias con decisiones que perjudican a nuestro sector, pero se consideran necesarias. Pero lo que no entendemos es que los responsables regionales a nivel económico y turístico se limiten a ser meros observadores de las políticas sanitarias y abandonen sus responsabilidades de gestión en sus respectivos ámbitos competenciales", expone Carlos Díaz, presidente de la Asociación de Hoteles de Castilla y León.
Durante la reunión, responsables del colectivo han exigido que decaigan definitivamente el toque de queda y el cierre territorial de Castilla y León, ayudas directas inmediatas para las empresas "que están muertas" y previsiones para poder planificar. "A todo se nos dice que no se sabe, no se puede prever o no es posible porque no hay presupuesto", censuran, a través de un comunicado recogido por Europa Press.
Recuerdan que en el año 2020 esta Comunidad perdió la friolera de seis millones de turistas y, en lo que llevamos de año, ya se han dejado de recibir a más de dos millones adicionales, lo que "nos abocará al cierre de los hoteles y a que no se recuperen estas cifras de visitantes en el futuro porque no habrá hoteles para recibir a los turistas", según Carlos Díaz.
"Es necesario que el Gobierno regional cuente con interlocutores válidos para poder ayudar a los diferentes sectores. Estructurar ayudas de 4.000 euros o de 3.500 euros, después de más de un año de inactividad, evidencia su desconocimiento y falta de interés por una actividad económica tan importante en la región", concluyen.