La pandemia de COVID-19 no frenó en 2020 la adquisición de suelo industrial en Castilla y León, al crecer la superficie vendida en polígonos en un 15,7 por ciento con respecto a 2019. Un porcentaje que se eleva hasta el 53 por ciento en lo que se refiere a la venta de suelo industrial promovida por el Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE) de la Junta de Castilla y León, gracias a los planes del Gobierno autonómico para abaratar el precio de compra hasta en un 25 por ciento.

Según los datos de los informes anuales del Consejo Económico y Social (CES) de los dos últimos años, a los que ha tenido acceso Ical, la superficie empresarial adquirida pasó de las 4.881,2 hectáreas de 2019 a las 5.648,2 de 2020, un 15,71 por ciento más. Este crecimiento vino dado, principalmente, por el aumento del 53 por ciento en la compra de suelo industrial en los polígonos del ICE, que pasó de las 682 hectáreas adquiridas en 2019 a las 1.044 del pasado año.

En menor medida, también aumentó un 12 por ciento la adquisición de suelo empresarial en polígonos municipales, hasta alcanzar las casi 1.500 hectáreas; de los terrenos industriales mixtos, municipal y privado, cuya venta creció un 24,61 por ciento para pasar de las 845 hectáreas adquiridas en 2019 a las 1.053 de 2020; y del suelo solo privado, que alcanzó en el último año las 873 hectáreas adquiridas gracias a un aumento del 4,28 por ciento.

Todo ello pese al contexto de recesión provocada por la COVID-19, que sí provocó el estancamiento en el crecimiento del suelo empresarial de la Comunidad, que perdió un 0,38 por ciento de superficie con respecto al 2019 hasta situarse en 14.354 hectáreas, por las 14.408,4 con las que contaba Castilla y León en el año previo a la pandemia.

Se resintió asimismo, aunque en este caso por la conjugación entre el aumento de la adquisición de suelo empresarial y la falta de nueva superficie industrial, la cantidad total de suelo disponible para la venta, que bajó un 1,54 por ciento al pasar de las 1.387 hectáreas existentes en 2019 a las 1.366 que había el 31 de diciembre de 2020. También descendió la superficie de zonas no explotables, como viales, zonas verdes, aceras y rotondas, que pasó de las 3.900 hectáreas de 2019 a las 2.613 de 2020, un 33 por ciento menos; mientras que la superficie de metros cuadrados empresariales en proyecto sí experimentó un crecimiento del 11,65 por ciento: de 4.234 hectáreas en 2019 a 4.727 en 2020.

Todas estas fluctuaciones se dieron, no obstante, en un contexto de estabilidad en referencia al número de polígonos industriales en Castilla y León, puesto que en 2020 solo se contabilizó uno menos que los 366 del año precedente. Los polígonos municipales, que aumentaron en cinco, siguen representando dos quintas partes del total autonómico, con 149, mientras que el descenso en el número y la superficie de polígonos privados y los impulsados por el ICE hace que pierdan peso relativo en el conjunto de Castilla y León, representando el 20,5 y el 19,7 por ciento del total, respectivamente: tres y casi dos puntos menos que el año anterior.

Evolución por provincias



Todas las provincias de Castilla y León vivieron en 2020 un incremento de la adquisición de suelo empresarial en su territorio, si bien fueron Palencia y Burgos las que experimentaron un mayor crecimiento de la superficie industrial transferida al aumentar su adquisición un 42 y un 30,12 por ciento, respectivamente, alcanzando las 434,4 hectáreas vendidas en la provincia palentina y las 2.147,7 en la burgalesa, frente a las casi 306 y las 1.650,6 del año anterior.

También experimentó una subida notable el terreno empresarial adquirido en los polígonos de Salamanca y Soria, con un 15,12 y un 11,12 por ciento más que en 2019, respectivamente. La provincia charra pasó así de la venta de 327,2 hectáreas en 2019 a las 376,7 adquiridas en 2020, y en Soria se adquirieron el pasado año 298,7 hectáreas por las 268,8 del año precedente.

Más reducido fue el aumento porcentual de adquisición de suelo empresarial en Zamora (+7,23 por ciento hasta las 224 hectáreas), Ávila (+4,4 por ciento hasta las 156,7 hectáreas), León (+4,12 por ciento hasta las 719,8 hectáreas) y Segovia (+2,07 por ciento hasta las 300 hectáreas), mientras que en Valladolid la venta de superficie industrial se mantuvo estable y solo reflejó una subida del 0,54 por ciento, adquiriéndose 989,7 hectáreas por las 984,4 adquiridas en 2019.

En cuanto al progreso de la superficie empresarial total en cada provincia, la evolución fue más desigual que en su adquisición. Así, permaneció inalterada en Segovia (652,4 hectáreas), Soria (1.112,4 hectáreas) y Valladolid (3.053 hectáreas), si bien esta última sí experimentó la pérdida de un polígono mientras que en las provincias segoviana y soriana se mantienen los 29 y 35 existentes ya en 2019.  

En León, Salamanca y Zamora, aumentó en 2020 la superficie empresarial hasta las 2.356,8 hectáreas en el territorio leonés (+9,17 por ciento), las 969,4 hectáreas en el caso salmantino (+0,84 por ciento) y las 544 hectáreas de la provincia zamorana (+12,14 por ciento), aunque solo en Salamanca se reflejó también en un aumento de los polígonos industriales, al pasar de 29 a 30. León mantuvo los 61 y Zamora los 28 del año 2019.

Palencia disminuyó tanto en superficie como en polígonos, al registrar 4,5 hectáreas y dos polígonos menos que en 2019. En Ávila también descendieron los polígonos desde los 20 de 2019 a los 19 de 2020 pero aumentó la superficie empresarial desde las 461,5 hasta las 464 hectáreas, mientras que Burgos realizó el camino inverso: vio aumentado su número de polígonos en dos (de 59 a 61), pero el suelo industrial se redujo casi un 7 por ciento desde las 4.559,6 hectáreas de 2019 hasta las más de 4.242 que presentaba al finalizar 2020.

Menos suelo disponible del ICE



El aumento en un 53 por ciento de la venta de superficies industriales de titularidad autonómica, ubicadas en polígonos promovidos por el ICE, provocó que aunque la superficie real bruta de este suelo se mantuviera prácticamente inalterada con respecto al año anterior, al pasar de las 3.336 hectáreas de 2019 a las 3.332 de 2020, sí quedara, a 31 de diciembre del pasado año, un 16,8 por ciento menos de superficie real disponible, que se situó en 340 hectáreas frente a las 408 del año anterior.

Así, y como consecuencia de ese aumento de la venta de suelo empresarial, los polígonos del ICE entraron en 2021 con apenas 1.930 metros cuadrados disponibles en Salamanca, un 34 por ciento menos que al finalizar 2019, lo que sigue situando a la provincia charra como la que tiene menor disponibilidad de suelo industrial de titularidad regional para su adquisición, siendo el 0,1 por ciento del total autonómico.

Por el lado contrario, Palencia y Burgos, con 898.196 y 745.210 metros cuadrados respectivamente, son las provincias con mayor cantidad de suelo industrial real de titularidad regional disponible para su adquisición. De hecho, en Palencia aumentó un 8 por ciento la superficie a disposición para representar el 26,4 por ciento del total de suelo industrial de titularidad regional disponible en la Comunidad. Burgos, por su parte, representa el 21,9 por ciento, pese a la disminución de disponibilidad de este tipo de suelo en un 17 por ciento con respecto a 2019.

También disminuyó el suelo disponible en las provincias de León, que actualmente tiene disponibles 483.219 metros cuadrados (40 por ciento menos); Ávila, con 384.749 metros cuadrados (23,86 por ciento menos); Segovia, con 255.801 metros cuadrados (2,34 por ciento menos); y Zamora, con 169.005 metros cuadrados (46,37 por ciento menos). Por último, Soria, que continúa teniendo disponibles los 48.071 metros cuadrados de 2019, y Valladolid, que apenas disminuyó 3.032 metros cuadrados hasta los 411.864 disponibles al finalizar el año 2020, mantienen estable la cantidad de suelo industrial de titularidad regional disponible.