Todas las previsiones apuntaban, y así lo había anunciado el propio Ejecutivo, a que septiembre dejaría datos históricos de desempleo. Y así ha sido. La bajada registrada es de 10.281 personas, es decir, casi un 7% con respecto a agosto. De hecho, es un resultado muy superior al obtenido en esas mismas fechas hace exactamente un año, cuando la caída fue de tan sólo 2.366 personas.
Si bien es un indicador que confirma una tendencia positiva, la letra pequeña nos deja también un dato que confirma que la temporalidad en los contratos sigue siendo la tónica dominante. De los 87.906 contratos firmados durante el pasado mes, casi un 26% más respecto al mes anterior (18.079 en términos absolutos), son indefinidos sólo 7.888, es decir, menos de un 10% del total de los suscritos.
Sólo cuatro comunidades autónomas tienen una variación intermensual menor que Castilla y León, además de Baleares, que es la única de toda España que registra menos contratos que en agosto.
Por provincias, encabezan el número de nuevas contrataciones Salamanca (22%) y Ávila (20%). En el extremo opuesto se encuentra Palencia con un 6,37% menos de nuevas firmas con respecto a agosto de este año, convirtiéndose así en la única de las nueve que presenta un comportamiento negativo.
En términos interanuales, el comportamiento de la economía en Castilla y León apunta a casi un 10% más de nuevos contratos, con 7.966 más en términos absolutos.
La CEOECYL ha indicado que estos datos reflejan "el protagonismo de las empresas en la generación y el mantenimiento del empleo" y la necesidad de "reforzar la productividad y competitividad" para que puedan impulsar su capacidad de contratación.
En clave nacional, se firmaron 1.707.158 nuevos, de los cuales casi el 89% eran también de corta duración, en un momento clave para afrontar la recuperación de la economía.