El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y la consejera de Educación, Rocío Lucas, han participado hoy en una jornada nacional de presentación de la Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una especialización inteligente (RIS3) de Castilla y León 2021-2027. En el encuentro, empresas, universidades y centros tecnológicos han conocido el instrumento de planificación de la Junta que marca los objetivos y prioridades de la política de ciencia y tecnología de la Comunidad, en el que se incluyen actuaciones del ámbito de la investigación, el desarrollo tecnológico, la innovación (I+D+I) y la Agenda Digital para Castilla y León.
En la jornada se ha puesto de manifiesto la importancia de la RIS3 de cara a incrementar la competitividad de las actividades en las que Castilla y León está especializada, apostando no sólo por su transición digital y ecológica, sino aprovechando como nichos de oportunidad la digitalización, la descarbonización y la sostenibilidad exigida a nivel europeo y mundial, sin perder el sello de identidad de Castilla y León.
Vectores de transformación
La Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una especialización inteligente (RIS3) de Castilla y León 2021-2027, que da el relevo a la elaborada para el periodo 2014-2020, representa un nuevo planteamiento respecto a la anterior evolucionando hacia tres grandes vectores de transformación de la economía: ‘Castilla y León, territorio con calidad de vida’ ‘Castilla y León, neutra en carbono y plenamente circular’ y ‘Castilla y León, una apuesta por la fabricación inteligente y la ciberseguridad’.
Estas prioridades de trabajo, que se conciben como vectores transformadores de la economía y la sociedad, alinean los esfuerzos de diferentes sectores económicos y las capacidad científicas y tecnológicas de la Comunidad con la mirada puesta en 2027.
Además, la RIS3 de Castilla y León 2021-2027 comparte muchos elementos clave con la estrategia del periodo anterior como la integración de las políticas de I+D+I y de Sociedad de la Información; la apuesta por el desarrollo basado en el conocimiento, estimulando la inversión privada; o la elaboración en base a un proceso participativo para construir una visión compartida entre empresas, ciudadanos, universidades, centros de investigación y Administración.
Asimismo, entre los objetivos de la RIS3 2021-2027 se encuentra el mejorar y fortalecer el ecosistema de I+I, avanzar en la digitalización de la economía y sociedad y reforzar la gobernanza participativa para la especialización.
Estrategia finalista y abierta
En la jornada se ha explicado que la RIS3 2021-2027 es una estrategia finalista, puesto que busca la obtención de resultados a nivel económico y a nivel social, pero también es una estrategia abierta y en evolución, ya que recoge mecanismos para implementar un proceso continuo de descubrimiento emprendedor (PDE), basado en una gobernanza participativa. Este proceso permitirá a la Comunidad irse adaptando, e incluso anticipando, a las oportunidades que, aprovechando cambios científicos y tecnológicos, contribuyan a un mejor desarrollo de la visión compartida sobre la que se asienta la estrategia.
Además, la Estrategia recoge las directrices con las que deberán estar alineadas en el periodo 2021-2027 los diferentes planes y programas sectoriales u horizontales desarrollados por los diferentes centros directivos de la Junta de Castilla y León, y se desarrollará de acuerdo con los planteamientos del IV Acuerdo Marco para la Competitividad y la Innovación Empresarial de Castilla y León.
Por otro lado, contempla el compromiso existente en Castilla y León con la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, la integración de la perspectiva de género en el diseño e implementación de actuaciones, la participación de agentes sociales y económicos en el diseño y evaluación de las políticas públicas y la evaluación como elemento central de la planificación y transparencia en la gestión estratégica.
Recursos movilizados
La RIS3 de Castilla y León 2021-2027 movilizará 14.532 millones de euros a lo largo de su ejecución, a través de recursos tanto públicos como privados. Por un lado, la Junta invertirá las cantidades que se destinen a ciencia y tecnología en los sucesivos Presupuestos Generales de la Comunidad de Castilla y León para las anualidades 2022-2027, con una aportación de 3.816 millones de euros, del total de los 5.251 millones públicos que se movilizarán.
Por otro lado, la RIS3 estimulará la participación de los agentes del sistema de ciencia y tecnología (empresas, universidades, centros de investigación, centros tecnológicos, clusters, etc.) en programas de financiación de I+D+I y de digitalización procedentes de otras Administraciones Públicas locales, nacionales e internacionales, como los sucesivos planes estatales de investigación científica, técnica y de innovación, o los programas de la Unión Europea (programa Horizonte Europa, los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, Fondo de Innovación InvestEU, programa Europa Digital, etc.) todos ellos encaminados a contribuir significativamente a las orientaciones políticas de ciencia y tecnología en el periodo 2021-2027.
Contexto de elaboración de la RIS3
La Estrategia de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente de Castilla y León 2021-2027 ha sido elaborada en un contexto marcado por las transiciones ecológica e industrial e influenciado por el impacto y la crisis generada por la pandemia del COVID-19, que además de la crisis sanitaria, ha desembocado en una crisis socioeconómica de impacto global. Asimismo, junto al objetivo de la competitividad, en estos momentos se hace necesario construir una economía y una sociedad resilientes ante futuras amenazas.
Además, el principal marco de referencia de la RIS3 es el Acuerdo Marco para la Competitividad Empresarial de Castilla y León, que establece las directrices de la política empresarial de la Comunidad para los próximos años, siendo la RIS3 2021-2027 el instrumento de planificación de las políticas de I+D+I y digitalización.
Por otra parte, para la elaboración de la estrategia se ha reforzado la participación de los agentes de la denominada cuádruple hélice de la innovación: empresas, centros de I+I, Administración y sociedad, al tiempo que se ha iniciado un proceso continuado de descubrimiento de oportunidades empresariales, también denominado proceso de descubrimiento emprendedor (PDE).
Además, en este proceso se han tenido en cuenta fortalezas identificadas de la Comunidad como son: experiencia en el diseño y puesta en marcha de estrategias regionales de I+D+I y vinculadas a la Sociedad de la Información; buen posicionamiento de determinados ámbitos de la economía en cadenas de valor internacional (agroalimentación, transporte) y buena posición de partida respecto a otros territorios en aspectos relativos a calidad de vida (ciudades no masificadas, patrimonio natural y cultural) y sostenibilidad; nivel avanzado de infraestructuras de apoyo a la I+D+I: centros tecnológicos, parques científico-tecnológicos, clusters y hubs digitales; sistema de I+D+I reorganizado en torno a las prioridades de la especialización, o un potente sistema universitario regional.