El grado medio de ocupación de plazas se situó en Castilla y León en el 44,5 por ciento, ocho puntos por debajo de la media nacional del 52,2 por ciento y muy por encima del 23 por ciento registrado en la Comunidad el año precedente. Los fines de semana, ese indicador subió hasta el 56,9 en el caso de Castilla y León y el 60,5 por ciento en el conjunto del Estado.
La ocupación por habitaciones, según recogió la Agencia Ical, se situó en 52,4 por ciento en la autonomía frente al 59,8 por ciento nacional, mientras que el personal empleado aumentó hasta los 5.927, frente a los 5.037 que había doce meses atrás. En el mes de septiembre, la Comunidad contó con 1.108 establecimientos hoteleros abiertos (los mismos que un año atrás), que ofrecían 27.579 habitaciones para alojarse (650 más).
Provincias
Por provincias y en relación al año precedente, las pernoctaciones y viajeros se elevaron, y además notablemente, en todas ellas. El crecimiento de las pernoctaciones lo lideró Salamanca, con un 151 por ciento más que un año atrás hasta las 141.016, seguida por Burgos con un 108,9 por ciento y 109.214 en total. A continuación, aparecen Segovia, con un 107,3 por ciento (71.351); Valladolid, con un 101,5 por ciento (110.148); León, con un 90,6 por ciento (115.978), Ávila, con un 81,7 por ciento (49.374); Palencia, con un 72,8 por ciento (35.384); Zamora, con un 71 por ciento (37.310), y Soria, con un 52,1 por ciento (40.562).
En cuanto a los viajeros, la evolución porcentual fue encabezada por Salamanca, con un 137,5 por ciento más y 81.945 personas. Le siguen Burgos, con un 119,8 por ciento hasta los 71.879 viajeros; León, con el 112,9 por ciento (73.326); Segovia, con el 108 por ciento más (37.998); Valladolid, con el 101,8 por ciento (63.928); Ávila, con el 88,6 por ciento (30.872); Zamora, con el 83,2 por ciento (23.613 personas); Palencia, con el 74,8 (19.027); y Soria, con el 61,6 por ciento (21.326).