La compañía española Iberdrola vuelve a elegir Castilla y León como centro de su plan de dimensionamiento nacional en energías renovables. Y lo hace firmando un acuerdo con Siemens Gamesa para que Burgos sea el destino de un nuevo parque eólico terrestre que tendrá las turbinas más potentes del mundo, las de la plataforma 5.X.
No en vano, Castilla y León lidera el ránking nacional de producción de esta energía con un 23% del total nacional a cierre de 2021, 6.300 MW instalados y 267 parques repartidos por toda la región.
Todo ello mientras los precios de la electricidad siguen en cifras desorbitadas con un máximo hoy que llegará a los 0,437 euros/Kwh, lo que supone un incremento interanual del 170%.
Un mercado dominado por los precios del gas que hacen cada vez más imprescindible la inversión en energías alternativas no sólo para cumplir con los objetivos de la Agenda 2030 sino, además, que permitan ofrecer un marco de competencia más amplio y una menor dependencia del gas.
El nuevo parque eólico terrestre de Burgos se convertirá en el de mayor potencia instalada de España, lo que sitúa a Castilla y León como referente de esta renovable a nivel nacional, que ya encabeza el mix nacional.
Para comprender la dimensión de estas instalaciones, basta con calcular que una sola turbina de esta plataforma será capaz de suministrar energía 100% limpia a unos cinco mil hogares.
Fuerte impacto en la economía local
La decisión de que una gran compañía decida instalar un nuevo parque de renovables en una zona determinada genera un impacto en la economía local. Así, las nacelles de estos aerogeneradores se ensamblarán en la planta de Siemens Gamesa de Ágreda (Soria) y distintos proveedores españoles se encargarán de producir otros componentes, como las torres de estos aerogeneradores.
Los 94 MW de energía limpia que producirá este parque eólico permitirán proporcionar electricidad a más de 75.000 hogares, o lo que es lo mismo, a más de la mitad de toda la provincia burgalesa.
Respecto a su contribución al medioambiente, la instalación de este nuevo parque permitirá evitar la emisión de 250.000 toneladas de CO2 al año, lo cual equivale a unos 150.000 vehículos de propulsión por combustión de fósiles. Algo que, por ejemplo, sólo se conseguiría plantando cuatro millones de árboles.
Lars Bondo Krogsgaard, CEO Onshore de Siemens Gamesa, ha declarado que este acuerdo entre su compañía y la española Iberdrola supone tiene especial importancia "porque supone la primera instalación de la plataforma Siemens Gamesa 5.X en España, la turbina eólica terrestre más potente del mundo, que sin duda va a contribuir significativamente al proceso de transición energética del país"
España es el quinto país del mundo por capacidad eólica instalada con más de 28 GW, según datos de la AEE (Asociación Eólica Española). Para 2030, el Gobierno español se ha fijado como objetivo que el 42% del uso final de la energía provenga de renovables y que la presencia de estas fuentes en el sector eléctrico sea del 74% hasta llegar al 100% en 2050.