El miedo a un posible desabastecimiento de leche derivado de la huelga de transportistas iniciada el pasado 14 de marzo en toda España y tras anunciar la patronal de esta industria que dejaba de recoger este alimento perecedero por las dificultades con las que se estaba encontrando, está llevando a los consumidores a vaciar los estantes de leche en los supermercados de Castilla y León.
Sin embargo, fuentes de Lactacyl, la Federación Castellano y Leonesa de Industrias Lácteas, aseguran que no hay problema de recogida de leche en las granjas de la Comunidad ni de entrega en las fábricas "porque en Castilla y León se recoge sobre todo a productores y cooperativas locales", lo cual evita que las distancias sean largas hasta que llega a la industria.
No obstante, desde Lactacyl sí denuncian que "hay transportistas que empiezan a negarse a recoger leche más por miedo a represalias que porque no quieran llevarla", si bien esta situación se da, sobre todo, "en Cataluña, Andalucía, Galicia y Asturias".
De hecho, la última en encender todas las alarmas ha sido la multinacional Danone, que ha anunciado hoy que "parará su actividad en 24 horas si no se llega a un acuerdo con los transportistas", lo cual provocaría un corte en la cadena de suministro en todo el país.
Caída del 25% en Mercaolid
El gerente de Mercaolid, Javier Pastor, informaba ayer de que han recibido un 25% menos de aprovisionamiento durante el pasado fin de semana en relación a otro normal a causa de la huelga de transportes y del paro en la flota pesquera.
La huelga de transportes, que continúa en activo a pesar del acercamiento ayer entre el Gobierno y el Comité Nacional de Transportes por Carretera (CNTC) con el anuncio de una subvención de 500 millones de euros para paliar los sobrecostes del gasóleo, afecta sobre todo a la recepción de productos frescos de la huerta de Almería y Murcia, por lo que la dirección de este complejo de distribución mayorista está buscando "rutas alternativas" para garantizar el abastecimiento a la población.