Castilla y León tiene una deducción para jóvenes menores de 36 años que tengan una vivienda alquilada. La desgravación es del 20% y tiene un límite de 459 euros al año. Además, este límite se puede aumentar hasta el 25% y los 612 euros anuales cuando el domicilio esté en un municipio de 10.000 habitantes o menos de 3.000 euros si dista menos de 30 kilómetros de la capital de la provincia.
El contribuyente tiene que sumar una base imponible y del ahorro menos el mínimo personal y familiar que no supere los 18.900 euros en la tributación individual, 31.500 euros en la conjunta, que puede encontrarse en las casillas 0435, 0460 y 519 de la declaración de la Renta.
Del mismo modo, se debe aportar el NIF del arrendador en el apartado 'Información adicional a la deducción autonómica por arrendamiento' del Anexo B.6 de la declaración de la Renta. En caso de que haya un segundo arrendador, también hay que aportar dicha información.
Por otro lado, existe otra deducción por inversión en rehabilitación de viviendas destinadas al alquiler en núcleos del mundo rural. En este caso la deducción es del 15% de las cantidades invertidas con un máximo de 20.000 euros y siempre que el valor del domicilio sea menor a 135.000 euros.
Además, esta vivienda debe estar situada en un municipio que no sobrepase los 10.000 habitantes o 3.000 en caso de estar a menos de 30 kilómetros de la capital de la provincia. Dicha vivienda tiene que estar alquilada durante los próximos cinco años siguientes a la reforma y la renta no puede superar los 300 euros al mes.