Los colegios de ingenieros industriales de Castilla y León abogan por la reapertura inminente de las líneas ferroviarias situadas en los corredores europeos que atraviesan la Comunidad, así como por realizar las mejoras necesarias en capacidad, sistemas de explotación y estándares de las líneas actuales en servicio.
Se trata de potenciar el transporte de mercancías por ferrocarril “aprovechando la capacidad de las líneas en servicio y unas infraestructuras que ya están construidas, aunque abandonadas algunas de ellas”.
A juicio del colectivo, se trata de una “oportunidad de gran interés” para Castilla y León, ya que, por ejemplo, la recuperación de las líneas férreas vinculadas al ‘Corredor Atlántico’, uno de los principales de la Península, es un proyecto que puede recibir financiación por parte de la UE.
De llevarse a cabo esta iniciativa, “con una inversión reducida se pondría en servicio la mejor alternativa para el transporte terrestre de mercancías, tanto en términos económicos como desde el punto de vista ecológico y sostenible”, aseguró el ingeniero industrial y presidente de honor de la Asociación Europea de Ferroviarios-Sección Española, José Cañizares, miembro también de la Comisión de Transporte y Logística del Colegio de Ingenieros Industriales de Madrid y fundador de la Alianza Corredroes.eu.
Cañizares ha dedicado buena parte de su actividad en 2021 (Año Europeo del Ferrocarril) a fomentar el uso de las vías férreas, con el objetivo de contribuir a alcanzar la neutralidad climática en 2050 establecida en el Pacto Verde Europeo. Es uno de los expertos que ha participado en la reunión celebrada este jueves por la Comisión de Transportes del Colegio de Ingenieros Industriales de Madrid (COIIM) en Valladolid.
El sector considera que debido a su situación geográfica en la Península Ibérica, Castilla y León es una comunidad “privilegiada” que acoge distintas líneas ferroviarias de la Red Básica de Corredores Europeos. Entre ellas, por ejemplo, las que conectan la autonomía con los puertos del norte (Vigo, A Coruña, Gijón y Bilbao), con Europa a través de Francia, con el este peninsular (por Miranda de Ebro) y con el centro. Y también, las líneas que conectan con los puertos portugueses de Aveiro y Oporto (por Salamanca) o con el sudoeste de la Península a través de la Vía de la Plata.
En opinión de Cañizares, “Castilla y León tiene la oportunidad de elaborar un plan de reapertura de estas líneas, que pueden recibir financiación europea, con el fin de impulsar un modelo intermodal de transporte en el que el ferroviario tenga un papel protagonista”.
De esta manera, añadió, la Comunidad “asumiría el papel que le corresponde como potencia logística de la Península Ibérica, en coherencia con su extensión y su ubicación estratégica”.
Operador Ferroviario de Proximidad (OFP)
Para poner en valor la opción del transporte ferroviario de mercancías, los expertos de los colegios de ingenieros industriales abogan, entre otras iniciativas, por la implantación de la figura denominada ‘Operador Ferroviario de Proximidad’ (OFP), que se ha implantado con notable éxito en Francia y, aunque con algunas variantes, también en Suecia, Alemania y Estados Unidos.
Dadas las características de Castilla y León, así como el volumen de mercancías que se transportan actualmente por carretera, la implantación de un OFP permitiría integrar ambas fórmulas (carretera y vías férreas), a través de los principales centros logísticos de la Comunidad.
Este sistema permitiría ofrecer un servicio más económico y ágil para los recorridos ferroviarios de ‘última milla’, que utilizarían tanto la red ferroviaria actual como las líneas de débil tráfico o las que se hayan podido rehabilitar y estén nuevamente en servicio.
Castilla y León absorbe actualmente en torno al ocho por ciento del transporte de mercancías por carretera de toda España; es decir, 143 millones de toneladas de los 1.800 millones de todo el territorio nacional.
Coherente con la agenda europea
Potenciar el transporte ferroviario de mercancías, como proponen los colegios de ingenieros industriales de Castilla y León, es “coherente con los grandes objetivos de la Unión Europea”.
De hecho, la agenda 2050 contempla que el transporte ferroviario y el marítimo concentren la mitad del tráfico europeo de mercancías; y el propio Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ya prevé que el ferrocarril alcance el 10 por ciento del transporte nacional de mercancías en 2030.
Para lograr esos objetivos, los ingenieros industriales proponen, además, potenciar y mejorar las infraestructuras de los centros logísticos, apoyándose en el Cylog, con mejores accesos a la red ferroviaria; ampliar la capacidad de las grandes terminales, también como puertos secos de Portugal, Galicia y toda la Cornisa Cantábrica; así como abrir una línea de cooperación con el gestor de infraestructuras y la empresa ferroviaria portuguesa, con el fin de poder ofrecer los mejores planes de transporte ferroviario para los tráficos terrestres de los puertos portugueses y de sus principales terminales, como es el caso de la nueva de Lousado (norte de Portugal).
Por último, plantean que la Comunidad apoye la implantación y desarrollo de la Alianza Corredores.eu, constituida ya como asociación, mediante la incorporación del Cylog a la misma.