La patronal regional discrepa con los sindicatos sobre las subidas salariales vinculadas al IPC y el establecimiento de cláusulas de revisión salarial y plantea, frente a la inflación galopante, vincular las mejoras en las retribuciones a “aumentos de productividad y no indexándolas a la inflación”. Asimismo, CEOE en Castilla y León cree que es preciso reducir y estabilizar el marco regulatorio para el desarrollo de la actividad empresarial; rebajar la presión fiscal; adelgazar y simplificar las cargas administrativas; perseguir la economía sumergida y la consecución de la unidad de mercado, para sostener la competitividad de los productos de la Comunidad, que alcanzó ventas récord a otras autonomías en el primer semestre del año.
Los datos que facilita el Proyecto C-interreg, recogidos por Ical, indican que la Comunidad exportó productos a otros territorios de España entre enero y marzo por 6.785 millones de euros, el dato más alto de la serie histórica. Un año antes por las mismas fechas, la cifra era de 5.467 millones; y en el ejercicio que arrancó la pandemia, a 4.890.
CEOE Castilla y León indicó que “a priori, estos datos parecen apuntar cómo los productos castellanos y leoneses continúan siendo atractivos, de elevada calidad y competitivos también para otras comunidades autónomas”, en un contexto marcado por la invasión bélica de Rusia en Ucrania, o las propias e importantes limitaciones a la movilidad que aún imperan en China, que “están generando una compleja situación económica marcada por una importante subida de precios de materias primas, desabastecimiento de ciertos materiales y productos, y por tanto notables estrangulamientos en las cadenas de abastecimiento”.
Una competitividad que hay que defender, indicaron, conteniendo los precios, y junto a las medidas cuyunturales, apeló a reducir la dependencia exterior energética, y apostó por la transformación digital, la innovación tecnológica, la sostenibilidad, y el necesario refuerzo de la inversión en I+D+i y en formación. En este sentido, exigió a las diferentes administraciones públicas que impriman mayores dosis de flexibilidad y agilidad a la canalización de los Fondos Next Generation EU hacia las empresas grandes, medianas y pequeñas, con el fin de que “puedan avanzar en términos competitivos hacia los retos planteados, donde también la colaboración público privada adquiere una especial relevancia que requiere de mecanismos que faciliten su impulso y le doten de mayor capacidad de adaptación a los diferentes proyectos”.
Los datos
Cabe destacar que el mes de marzo de 2020, cuando se declaró el estado de alarma por la COVID, marcó un punto de inflexión en la demanda de productos castellanos y leoneses desde el resto de España, y las ventas registrado una progresión ascendente constante ante los problemas de abastecimiento desde otros países, junto con su encarecimiento por la inflación. En este sentido, trimestre a trimestre han ido aumentado, 5.213 millones (tercero 2020); 5.238 (cuarto); 5.467 (primero 2021); 5.969 (segundo); 6.087 (tercero); 6.743 (cuarto); y 6.785 (primero 2022).
Las importaciones sin embargo, frenaron su ritmo de crecimiento hasta los 6.575 millones de euros en relación al último trimestre de 2021, cuando sumaron 6.789 millones de euros, muy marcadas por la subida de precios de los productos y las dificultades de abastecimiento de algunas materias y componentes. Con todo, el dato está muy por encima de los 5.815 millones del primer trimestre de 2021, y de los 5.149 de 2020.
La balanza comercial de la Comunidad arrojó un superávit de 210 millones entre enero y marzo de este año, cuando en los mismos meses del ejercicio anterior sólo sumó 13 millones; y al déficit de 262 millones del primer trimestre de 2020, juntos antes de estallar la COVID.
El consumo interno también se redujo respecto al cierre del año pasado, con 3.399 millones de euros, siempre según C-Intereg, ya que el trimestre anterior ascendió a 3.408 millones. Se repite la situación de las importaciones, ya que el valor de comercio intraregional fue muy superior no obstante al dato de 2021 por las mismas fechas, 2.729 millones; y al de 2020, 2.618.
Por último, el análisis comercial revela que Castilla y León se consolidó en el primer trimestre como la tercera autonomías en exportaciones interregionales en España, con el nueve por ciento del total, solo por detrás de Andalucía y Cataluña (16,2 por ciento, respectivamente). Asimismo, indica que en el ranking del comercio total de bienes supuso el 2,7 por ciento, y se fue a la sexta posición, lejos de Cataluña (9,7) y Andalucía (4,9 por ciento), las dos primeras.