Los Grupos de Acción Local (GAL) piden que los Ayuntamientos puedan intervenir en las casas abandonadas de los pueblos y que la población flotante sirva para redimensionar los servicios en los pueblos.

Un estudio de la situación de las empresas rurales en Castilla y León, que se enmarca en el proyecto de cooperación regional Leader +Empresas, +Empleo y +Rural, concluye que, a pesar de que la mayor parte de las políticas vinculadas al desarrollo rural se basan en incentivar el empleo para fijar población, el mercado laboral es un factor "relevante pero no suficiente por sí mismo" para solucionar los problemas de arraigo y atracción de población de los espacios rurales, según recoge Ical.

De ahí que el trabajo coordinado por la profesora de Geografía de la Universidad de Valladolid (UVa), Milagros Alario, plantea algunas propuestas para revertir esta situación como la flexibilización de la normativa para que los ayuntamientos tengan capacidad funcional de intervenir en casa o solares abandonados y así paliar el problema de la falta de vivienda además de tener en cuenta la población flotante que tiene estos territorios para redimensionar los servicios públicos en los pueblos.

El análisis, encargado por once grupos de acción local de seis provincias de Castilla y León, salvo Ávila, Soria y Zamora, apostó por corregir los problemas del medio rural que, a su juicio de sus autores, debe pasar por un conjunto de medidas de "discriminación positiva". No en vano, consideraron que tratar igual a espacios que tienen desiguales condiciones no es una forma de "avanzar" hacia la igualdad.

Entre otras propuestas, Alario citó la mejora de la conectividad para que las zonas rurales tengan una velocidad para navegar por internet "igual a la mínima" de las ciudades. "Hay que hacer atractivos los pueblos para que puedan entrar a jugar en la toma de decisiones de ubicación de nuevos pobladores o de nuevas empresas", sentenció la profesora de la UVa.

También valoró la necesidad de introducir el concepto de rentabilidad social, más allá de la económica, en la toma de decisiones sobre el despliegue de los servicios. En este sentido, el estudio reclama primar a las empresas del ámbito comarcal frente a las grandes que monopolizan el mercado a la hora de presentarse a las licitaciones de obras que tienen lugar en el medio rural. "A veces, no es cuestión de fondos que ya llegan al ámbito rural sino utilizarlos de forma adecuada o que se hagan las cosas de otra forma", aseguró.

Además, planteó ser más ágiles en la adaptación de las ofertas formativas acordes a las necesidades del tejido productivo en cada momento y trabajar con una concepción supramunicipal en torno a unidades "coherentes" y "estables" en el tiempo que permitan, a medio y largo plazo, el diseño e implementación de servicios de atención universales en temas de transporte, servicios sociales o personales.

Esto pasa por contar con centros comarcales bien dotados. En este sentido, se pide tener en cuenta el papel "fundamental" de la población que reside en los pueblos varias semanas o meses cada año para "redimensionar" los servicios públicos. "Al no estar empadronados, los municipios no reciben los recursos económicos por población ni se tienen en cuenta a la hora de diseñar servicios públicos, por lo que se podría plantear un doble empadronamiento", expuso Milagros Alario.

El estudio constató que el espacio rural es "muy dinámico" desde el punto de vista económico, incluso en los territorios de baja densidad de población, al ser un lugar muy innovador y contar con el fuerte arraigo del empresariado local. No en vano, tras realizar entrevistas a más de 800 empresarios se llegó a la conclusión de que los emprendedores de los pueblos están muy unidos sentimentalmente a sus lugares de origen ya que más de las tres cuartas partes apuesta por continuar en ese municipio antes de irse a una ciudad con más oportunidades. 

"Muy dinámico" pero lastrado por la demografía

Eso sí, ese dinamismo económico está lastrado por la dinámica demográfica negativa, enmarcada en un contexto histórico después de los pueblos sufrieran un éxodo rural en las décadas de los 40, 50 y 60 del siglo pasado. "Fue una salida de población selectiva como jóvenes y mujeres que ha lastrado la demografía del futuro", subrayó Alario. Una situación que, a su juicio, sólo se puede compensar con un cambio de comportamiento demográfico, con más nacimientos, pero sobre todo con nuevos aportes de población, con la llegada masiva de inmigrantes. 

La profesora de la UVA destacó que, de forma global, el empleo crece en el medio rural, pero la población disminuye. Fue entonces cuando apuntó que los jóvenes no se quedan en un entorno rural si no hay más jóvenes con los que interactuar y disponer de lugares que ofrezcan similares condiciones de vida que los espacios urbanos. De ahí que la falta de vivienda disponible, el acceso a los servicios y un deficiente transporte dificultan a la hora de asentarse en un pueblo. 

También abogó por mejorar la percepción negativa sobre las posibilidades de los espacios rurales para el desarrollo personal que, en ocasiones, está incentivado por los propios padres con la frase 'estudia y vete'.

Los grupos de acción local participantes en el proyecto son los burgaleses Adecoar, Agalsa y Ceder Merindades; los leoneses Asociación Cuatro Valles y Poeda; los segovianos Codinse, Honorse-Tierra de Pinares y Asociación Segovia Sur; Adecocir, en Soria; Tierras Sorianas del Cid en Soria y la Asociación Colectivo para el Desarrollo Rural de Tierra de Campos en Valladolid. Todos ellos suman casi 22.900 kilómetros cuadrados y 268.000 habitantes, con una densidad media por debajo de los doce personas por kilómetro cuadrado.

Un informe presentado hoy en la sede del Consejo Económico y Social (CES) de Castilla, donde su presidente Enrique Cabero, apuntó que hablar de programas específicos pensados para el medio rural es una de las líneas de trabajo del CES. "Somos conscientes que el medio rural es imprescindible para el progreso de la Comunidad y del país, en su conjunto. Se está planteando una nueva dimensión del medio rural como elemento necesario para la transformación de la sociedad y del modelo económico y productivo en este contexto difícil que atravesamos", precisó.

Además, valoró el estudio al abordar cuestiones como la rentabilidad, el trabajo, la posibilidad de generar oportunidades para fijar población en el medio rural. "Hace años, no se tuvo en cuenta el valor que tenía el medio rural y lo que podía aportar al desarrollo en el conjunto de la sociedad. Creo que eso se ha logrado vencer porque es muy importante la actividad de los grupos de acción local", significó.

Por su parte, el gerente del para el Desarrollo Rural de Tierra de Campos, Javier Paniagua, declaró que la plataforma integral de recursos de empleo rural ya ha dado sus primeros resultados a la hora de conectar la fuerza laboral que reside en los pueblos con las necesidades de las empresas y los negocios.

En concreto, en los primeros quince meses desde el inicio del proyecto, se han gestionado cerca de un millar de ofertas de empleo en el medio rural de Castilla y León, más de 5.700 personas están inscritas en el portal de empleo y, actualmente, hay vigentes 78 ofertas de empleo.

Además, se han puesto en marcha espacios de aprendizajes dirigidos a desempleados para que adquieran competencias para poder realizar una búsqueda de empleo eficaz con el fin de aumentar sus oportunidades laborales y profesionales.