El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, asumió hoy que Castilla y León no cumplió el objetivo “recomendado” del 0,3 por ciento de déficit para las autonomías el año pasado, pero recalcó que su 0,69 por ciento se situó muy por debajo del 0,91 por ciento de la media para el conjunto de las autonomías.

Carriedo analizó para Ical el cierre presupuestario de la Comunidad, el año pasado, y destacó que Castilla y León fue capaz de recortar ese déficit en 0,45 puntos en relación al 1,14 por ciento del año anterior, cuando las autonomías en su conjunto solo lo bajaron en 0,22 puntos.

El consejero portavoz también recordó que, tras la pandemia, se eliminaron las reglas fiscales, por lo que el objetivo del 0,3 por ciento establecido por el Ministerio de Hacienda era solo una recomendación, a pesar de lo cual denunció que no han sido capaces de volver al nivel de gasto previo a la Covid, cuando llegaron desembolsos para quedarse, de forma estructural, en sanidad, educación y servicios sociales, mientras que el modelo de financiación sigue sin reformarse. “Ese gasto se ha quedado con carácter estructural y no esta financiado por el sistema”, resumió.

Pese a todo, Carriedo insistió en que Castilla y León “soporta la situación mejor que otros territorios” lo que se refleja en ese porcentaje de déficit menor que la media, que es mucho menor que si se tuviese en cuenta solo a las autonomías de régimen común, en las que se elevaría al uno por ciento.

Aseveró el consejero que aunque el 2023 se registró un porcentaje de déficit por encima del objetivo, la Comunidad venía de ejercicios como 2020, con superávit, o 2021, con un “buen dato”, por lo que gracias a ese margen, aseguró que “considerando todo el periodo de pandemia y post-pandemia, Castilla y León estaría cumpliendo objetivos”.

La recaudación tributaria de la Junta desciende un 4,6% en 2023

La Junta de Castilla y León recaudó 735,17 millones de euros en 2023 a través de los tributos cedidos y los propios, lo que representa un descenso del 4,6 por ciento respecto al dato del año anterior, con casi 36 millones menos de ingresos. En concreto, los tributos cedidos sumaron 639,28 millones de euros, un 4,9 por ciento menos, y los propios, 69,66 millones, con una merma del 4,8 por ciento.

El análisis refleja que el Impuesto sobre Patrimonio fue el único que elevó sus ingresos, un 7,8 por ciento, hasta los 45,62 millones de euros. La recaudación de Sucesiones y Donaciones, tras su “normalización” en 2022 (después de su eliminación en primer grado en 2021), apenas se contrajo un 0,18 por ciento, con 192,16 millones de euros.

La recaudación por Transmisiones Patrimoniales alcanzó los 244 millones de euros, con un descenso del 4,5 por ciento; y la de Actos Jurídicos Documentados, los 96,27, un 13,1 por ciento menos. Los ingresos por la Tasas sobre Juego sumaron 61,21 millones, con una bajada del 13,3 por ciento, informa Ical.

En cuanto a los tributos propios, las tasas de la Comunidad reportaron a la Junta, 26,22 millones, con un aumento del 1,2 por ciento; y el Impuesto sobre Afección Medioambiental, 67,71 millones, con un avance del 3,5 por ciento. El gravamen sobre Eliminación de Residuos sumó 1,95 millones, un 74,76 por ciento menos, tras su derogación.

Delegaciones

La recaudación por delegaciones sólo se elevó en Valladolid (132,24 millones de euros), un 1,1 por ciento; y Salamanca (96,23 millones), un 0,7 por ciento. Por el contrario, descendió en Soria (29,69 millones de euros), un 19,6 por ciento; en Burgos (108,1 millones), un 17,4 por ciento; en Ávila (42,88), un 3,2 por ciento; en Palencia (41,57), un 2,6 por ciento; en Segovia (47,23) y Zamora (39,43), un 2,2 por ciento, en ambos casos; y en León (109,28), un 1,9 por ciento. Los servicios centrales recaudaron 88,48 millones, un 1,5 por ciento menos que en 2022.

Causas del descenso

La Memoria sobre Gestión Tributaria del ejercicio, recogida por Ical, explica este descenso por la ralentización del mercado inmobiliario e hipotecario consecuencia de la escalada del Euríbor, que repercute fundamentalmente en la recaudación del impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados. En este sentido, el documento aclara que ese descenso también responde a que en 2022, la transmisión de viviendas que constituye el epígrafe más importante de este impuesto se situó en máximos de 15 años.

Asimismo, desde la Consejería de Economía y Hacienda se recalca que también impactó la desaparición de máquinas de juego y de azar, que desde el año 2014 supera el 14 por ciento, con su impacto fundamentalmente en los tributos sobre el juego. Además, las mismas fuentes constatan que tuvo consecuencias en el dato la derogación de impuesto propio sobre la eliminación de residuos en vertedero y la pérdida de su ingreso, que se cifra aproximadamente en un punto porcentual de la recaudación.

La memoria, a la que tuvo acceso Ical, explica también que la situación económica estuvo “condicionada por las tensiones geopolíticas y más concretamente los conflictos en Ucrania y en Oriente Próximo, la amenaza al comercio internacional en el Mar Rojo, la persistencia de la crisis energética, la incertidumbre sobre la escalada de precios y, significativamente, en el año 2023, por el incremento experimentado por el Euríbor y su consiguiente impacto sobre el mercado inmobiliario e hipotecario”.

Además, la Junta de Castilla y León destaca que el año pasado continuó adoptando medidas en el ámbito tributario (rebajas) para combatir este entorno adverso, a la vez que siguió “desarrollando una política fiscal moderada, inteligente y selectiva dirigida a mejorar la fiscalidad de las familias, los jóvenes, los autónomos y las empresas, a dinamizar la actividad económica y social de la Comunidad y a atraer y fijar población en el medio rural con una fiscalidad diferenciada más favorable”.

Mejores datos de la Comunidad

No obstante, la Junta recalca que en base al informe de la Inspección General del Ministerio de Economía y Hacienda sobre la recaudación de los tributos cedidos gestionados por las comunidades autónomas, Castilla y León tuvo un “mejor comportamiento” que la media tanto en recaudación total, como individualizada por tributo. En este sentido, concreta que en relación a la suma de los tributos cedidos, la evolución de la recaudación fue casi tres puntos (2,7 puntos porcentuales) más favorable en Castilla y León que en la media de las autonomías de régimen común.

Asimismo, el departamento que dirige Carlos Fernández Carriedo comenta que en transmisiones patrimoniales onerosas, la evolución de la recaudación fue nueve puntos proporcionales más favorable en Castilla y León que en la media en actos jurídicos documentados, un punto proporcional mejor.

Por último, indica que en sucesiones y donaciones, la diferencia es aproximadamente de diez puntos proporcionales más favorable para Castilla y León y en el impuesto sobre el patrimonio, supera los 16 puntos.

Razones

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, explicó hoy que la bajada de recaudación tributaria de 2023 se repitió en el conjunto de las autonomías, porque los tributos cedidos “son esencialmente los vinculados a las actividades inmobiliarias” y “en un contexto de ralentización del mercado, se ha notado, por su impacto en Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados”.

Carriedo trasladó a Ical que el mercado de vivienda ha estado marcado por el encarecimiento del precio del dinero, con las subidas del Euríbor, y las mayores exigencias de las entidades financieras a la hora de conceder créditos. “El mercado inmobiliario se ha retraído”, resumió.

Sin embargo, puso de relieve que Castilla y León se encuentra entre las autonomías en las que menos ha descendido la recaudación, con un impacto menor en Transmisiones Patrimoniales, dijo, porque las rebajas fiscales de la Junta “tuvieron un impacto favorable en la mejora de la liquidez de jóvenes y familias”, lo que facilitó que pudieran “adquirir su vivienda”.