La Consejería de Agricultura y Ganadería de Castilla y León ha recordado a la organización agraria UPA que "no se puede prohibir" el movimiento de mervcancías en la Unión Europea, incluido el cordero que se importa de Francia, por lo que ha pedido colaboración tanto a los operadores comerciales como a los consumidores para dar salida al lechazo, cochinillo y cabrito de los ganaderos de la comunidad.
Así han respondido fuentes de la Consejería al comunicado en el que UPA ha criticado este jueves la llegada de más de 1.500 piezas de cordero procedente de Francia a mataderos de la región en los últimos días, pero la Junta recuerda que no se puede actuar ante la llegada de mercancías de otros países de la UE.
Pero la Consejería ha recalcado que "todos" pueden ayudar a solventar el problema de la salida al mercado y consumo de lechazos, cochinillos y cabritos de los ganaderos de Castilla y León.
Como administración, han incidido en que actúan en diferentes campos, como es la interlocución que realizan entre productores, transformadores y distribución, las campañas de promoción en medios de comunicación para tratar de incrementar el consumo de los productos de la región, o las peticiones de ayudas para el almacenamiento del producto o similares.
A los operadores comerciales también les reclaman colaborar con el sector ganadero de la comunidad autónoma.
Y, finalmente, la Consejería ha subrayado la importancia de que los consumidores "sepan que si quieren asegurarse que el producto es de Castilla y León" deben fijarse en la etiqueta de la IGP de lechazo, en el de la Marca de Garantía del Cochinillo o en el logotipo de Tierra de Sabor que todos ellos indican que el origen es de Castilla y León, que son productos de los ganaderos de la región "y de máxima calidad".