La Junta de Castilla y León ha insistido al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en la necesidad de una respuesta "inmediata" de la Comisión Europea ante los problemas del sector agrario, especialmente en relación a medidas de mercado, derivados de la crisis sanitaria generada por el COVID-19.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, ha participado este miércoles por videoconferencia en la reunión que el ministro del ramo, Luis Planas, ha mantenido con todos los consejeros del ramo de las comunidades autónomas.
En ese encuentro, Carnero ha solicitado a Planas varias peticiones para mejorar la situación del sector agrario en nuestra Comunidad Autónoma a raíz de la declaración del estado de alarma, algunas de ellas, fundamentalmente las medidas de mercado, ya reivindicadas con anterioridad, han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo autonómico.
En cuanto al sector del ovino, el consejero ha agradecido la iniciativa del Ministerio con el proyecto de Real Decreto de ayudas para los ganaderos de ovino y caprino, aunque la Junta, este mismo martes, ha hecho aportaciones al proyecto esperando que puedan contribuir a mejorarlo. Una de las pretensiones es que se aumente el número de animales subvencionables de 70 a 130 y se amplíe el plazo de sacrificios a un mes más desde la finalización del estado de alarma.
Carnero ha recordado, a su vez, que "es totalmente necesario que además de esta ayuda, se aprueben por la Comisión Europea las ayudas al almacenamiento privado de carne de ovino y caprino ligero (lechazos y cabritos), en este caso destinada a los industriales que operan con la carne".
De no ser así, el consejero entiende que "los sacrificios se van a frenar y eso supondrá una importante bajada de precios a los productores que no podrán enviar los animales a sacrificio". Por ello, considera que hay que insistir a la Comisión Europea en el establecimiento inmediato de dichas ayudas.
Respecto al cochinillo, ha señalado que la realidad es que la producción de esta carne, tan especializada, dirigida al canal Horeca en más de un 90 por ciento, está parada y no tiene salida. Por tanto, la Junta ha solicitado al Ministerio que se introduzca en el Real Decreto que establece ayudas a la salida de lechazos y cabritos que las mismas se extiendan a los productores de cochinillo, solicitando también a la Comisión Europea, la ayuda al almacenamiento privado para este producto.
Para ello, se ha instado a que se incluya en dicho Real Decreto una ayuda para explotaciones especializadas en producción de cochinillo, 250 animales por explotación y una subvención de 32 euros por ejemplar sacrificado.
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural considera que estas explotaciones están muy especializadas y no pueden dedicar a cebo su producción, ni por instalaciones, ni por genética, ni por el sistema productivo que han seguido.
EPI Y TEST
Por otro lado, la Consejería ha vuelto a insistir en la necesidad de agilizar el abastecimiento de EPI para la industria agroalimentaria, dado que en Castilla y León existen unas 3.000 empresas de este tipo que dan empleo a 37.000 personas y supone unas necesidades a corto plazo de en torno a 500.000 equipos y de momento los stocks son escasos.
Así, de no contar con una reposición a tiempo, podría darse la situación de una una paralización de la producción de alimentos en ciertos sectores.
Por otra parte, se ha manifestado al Ministro la necesidad de recibir test rápidos para evitar los efectos de contagio entre trabajadores. La preocupación surge cuando aparece algún caso de COVID-19 en las plantillas y no se cuenta con la prevención adecuada para detectarlo a tiempo.
Carnero también ha insistido al Ministro Planas la necesidad de cuidar oportunamente el tráfico aduanero para facilitar la entrada de materias primas indispensables para el sistema agroalimentario, especialmente trigo blando y soja para alimentación animal y correctores vitamínicos minerales en piensos.
De la misma forma, el consejero ha apuntado la importancia de que los productos lleguen a su destino y no se rompa la cadena alimentaria, para lo que es fundamental el transporte y, aunque se observa que el tráfico de camiones no se está interrumpiendo, se considera necesario que se pueda en esta situación actual incrementar el límite de carga de 40 a 42 o 44 toneladas, de manera que se necesitaría menos transporte y se ahorrarían costes.
Durante la reunión, Carnero ha agradecido al Ministerio todas las intervenciones que está llevando a cabo para evitar problemas en la tramitación y en el pago de las solicitudes del presente ejercicio 2020, así como en la flexibilización de la gestión, tanto con los controles como en las posibilidades de pagos anticipados a partir del 16 de octubre. También en la gestión de pagos de ayudas de la PAC a inversiones y sectores específicos encaminadas a la flexibilización de todos los controles.
Además Carnero ha insistido en la necesidad de una respuesta urgente por parte de la Comisión Europea para recibir las ayudas correspondientes en los ámbitos de desarrollo rural, de industria agroalimentaria, de jóvenes y de inversiones para la mejora de las explotaciones, y en relación principalmente con los controles.
En cuanto al saneamiento ganadero, siguiendo las indicaciones del Ministerio, la Junta tiene previsto a partir de la semana que viene comenzar el saneamiento ganadero rutinario como venía haciéndose hasta ahora.