El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, ha visitado hoy el Centro de Selección y Reproducción Animal (Censyra) y el Laboratorio Regional de Sanidad Animal, en Villaquilambre (León). Este último adscrito al Servicio de Sanidad Animal de la Dirección General de Producción Agropecuaria, dispone de los recursos materiales y humanos necesarios para realizar el análisis de muestras de pacientes por la técnica de Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) para la detección del virus SARS-CoV-2.
Desde el momento en que la Consejería de Sanidad realizó la encomienda de gestión a la Consejería de Agricultura para la realización de estos análisis (20 de abril), hasta hoy, se han llevado a cabo 4.630 muestras de PCRs y 5.380 determinaciones (repeticiones cuando los resultados son dudosos).
Previamente a la firma de esta encomienda de gestión, desde el Laboratorio Regional de Sanidad Animal se ha estado trabajando conjuntamente con el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) para que éste pudiera validar la capacidad diagnóstica del Centro Regional para la realización de los test PCR. Con esta validación, que se hizo pública el 14 de abril, queda acreditada la solvencia de este Laboratorio en cuanto al cumplimiento de los requisitos de bioseguridad y disposición del personal técnico además de los procedimientos adecuados para poder realizar estas pruebas.
Entre los requisitos necesarios para recibir la validación están: contar con personal formado en técnicas de biología molecular, capacidad para trabajar con muestras infecciosas de nivel 2, disponer de cabina de bioseguridad y equipos adecuados, manejar técnicas de extracción por medios propios que no resten capacidades a los centros hospitalarios y poder realizar PCR por medios propios o mediante kits comerciales.
En la visita, el consejero ha destacado que “la sanidad animal es la que garantiza la salud pública, no sólo en lo que se refiere a la prevención de enfermedades transmisibles entre los animales y el hombre, sino en el objetivo fundamental de la producción primaria, que no es otro que el obtener alimentos sanos, seguros y de calidad para un consumidor con exigencias crecientes, eso supone, por tanto, una pieza clave en la seguridad alimentaria”.
De ahí la importancia que siempre ha tenido la vigilancia epidemiológica veterinaria en la Comunidad Autónoma, que ha sido precursora en la implantación de herramientas que faciliten la toma de decisiones.
“Todas las actuaciones realizadas en Castilla y León en materia de sanidad animal”, ha añadido Carnero, “tienen su base en una estructura clave como es la Red de Laboratorios de Sanidad Animal, que son una pieza básica en la Red de Alerta Sanitaria, y por tanto, del Sistema de Vigilancia Epidemiológica en sanidad animal”.
La sanidad animal es una pieza clave en la posibilidad de exportaciones ganaderas. Y garantiza la salud pública en cuanto que minimiza la posibilidad de transmisión de enfermedades animales-hombre (zoonosis), garantiza al mismo tiempo la seguridad alimentaria (enfermedades transmitidas por alimentos) y realiza estudios de seroprevalencia de distintas enfermedades zoonósicas tanto en la fauna silvestre como en los animales domésticos.
Características diferenciales y valor añadido del Laboratorio Regional de Sanidad Animal
Este Centro de referencia, pionero en sanidad animal, en el que trabajan 52 profesionales, se ha concebido como el instrumento más moderno para responder a las necesidades del sector ganadero de Castilla y León tanto en materia de sanidad animal como de protección de la salud, coordinando todas las labores que se realizan en la Comunidad en el diagnóstico de enfermedades de declaración obligatoria. Está dotado de los medios materiales más avanzados para el diagnóstico y potentes a nivel nacional (tecnología robotizada), procesando un número de muestras microbiológicas cuatro veces superior a otros laboratorios autonómicos. Además cuenta con las medidas de seguridad biológica necesarias para cada una de las áreas de trabajo en las que están divididas. En este laboratorio se llevan a cabo, anualmente, más de 1.200.000 analíticas encuadradas en las diferentes áreas con las que cuenta: serología, microbiología, parasitología, biología molecular, encefalopatías espongiformes transmisibles y cultivos celulares.
Así mismo, garantiza el diagnóstico de enfermedades en un periodo de tiempo mínimo (las enfermedades de rápida difusión como gripe aviar en 24 horas) permitiendo así la detección precoz de enfermedades y evitando daños directos a la ganadería o restricciones comerciales.
Es el único laboratorio de la Comunidad que desarrolla determinados programas sanitarios con impacto directo en la ganadería (como la agalaxia contagiosa ovina).
Repercusión de la sanidad animal en la salud pública, enfoque ‘One Health’
La sanidad animal tiene una dimensión que va más allá de su importancia en la producción ganadera. Es la que garantiza la salud pública, no sólo en lo que se refiere a la prevención de enfermedades transmisibles entre los animales y el ser humano, sino en el objetivo fundamental de la producción primaria, que no es otro que el hecho de obtener alimentos sanos, seguros y de calidad suponiendo, por tanto, una pieza clave en la seguridad alimentaria.
Esta política de trabajo, denominada por la Organización Mundial de la Salud como enfoque ‘One Health’ o ‘Una salud’ está concebida para diseñar y aplicar programas e investigaciones en el que profesionales de diferentes especialidades como la salud humana, la salud animal y la salud vegetal colaboran para lograr mejores resultados de salud pública.
Itacyl, 17.000 hisopos en tres semanas
En el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León, el laboratorio de microbiología también está manos a la obra para colaborar con la Consejería de Sanidad frente al Covid-19. Hasta el momento ya ha elaborado 17.000 hisopos con los que se toman las muestras a los pacientes para realizar las pruebas PCR.
De media, diariamente, se están generando 1.200 kits de pruebas de diagnóstico, para contribuir a dar respuesta a las necesidades de la Comunidad.
Centro de Selección y Reproducción Animal (Censyra)
En este Centro, con 70 años de bagaje, se trabaja diariamente para conseguir una mejora genética de la cabaña mediante la aplicación de técnicas de selección y reproducción animal.
En el Laboratorio de control lechero oficial, anualmente se realizan 1.156.000 muestras individuales de leche de vacas, ovejas y cabras, incluidas en los esquemas de selección, donde se analizan parámetros como: la grasa, proteína, extracto seco, células somáticas, urea o acetona. Esa infomación se pone después a disposición de las asociaciones de ganaderos para valorar genéticamente a los sementales y las hembras.
En cuanto a la inseminación artificial bovina, anualmente se elaboran casi 91.000 dosis seminales a partir de 26 toros de 18 razas, para los programas de mejora de las asociaciones de ganaderos. Principalmente de raza Frisona y Limusin pero también de razas autóctonas amenazadas como Sayaguesa, Alistana-Sanabresa, Morucha y Mantequera Leonesa puesto que se está colaborando con el Departamento de Producción Animal de la Facultad de Veterinaria de León en un proyecto de recuperación de esta raza.
Además, el Censyra cuenta con un banco de germoplasma que guarda las dosis seminales para su distribución para la mejora genética y para mantener una reserva genética de razas autóctonas amenazadas.
En bovino las dosis almacenadas, a fecha de 31 de diciembre de 2019, ascienden a 888.915, obtenidas a partir de 470 machos donantes de 17 razas, siendo la más numerosa la Frisona pero también de Sayaguesa, Alistana-Sanabresa, Serrana Negra y Morucha.
En ovino las dosis almacenadas, a fecha de 31 de diciembre de 2019, son cerca de 155.000 que se han obtenido de 561 machos diferentes de 13 razas distintas, entre las que se encuentra la Churra con casi el 31% y la castellana con el 11% de las dosis almacenadas.
Hay que destacar su banco de ADN con 14.000 muestras de distintas especies y razas, con destino a estudios genéticos y la realización de pruebas de filiación para los libros genealógicos. En este sentido, el consejero ha dejado claro, que “el Centro también está a disposición de un sector que en estos momentos lo está pasando mal por la pandemia, como es el de la ganadería de lidia, teniendo aquí un gran abanico de oportunidades para preservar sus encastes de cara al futuro”.
El Censyra dispone además de una Unidad de Trasplante de Embriones bovinos y ovinos para los programas de mejora genética y para la creación de una reserva genética en razas en peligro de extinción.