La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, ha activado una línea de ayudas, dotadas con 450.000 euros para que las cooperativas puedan aumentar sus dimensiones mediante procesos de fusión o de incorporación de jóvenes, por ejemplo, de tal manera que mejoren así su posición en la cadena alimentaria más equilibrada.
Así se recoge en las bases reguladoras, publicadas este miércoles en el BOCyL, donde se abre la convocatoria de estas ayudas para la promoción del dimensionamiento del cooperativismo agroalimentario, siendo la primera línea que se publica tras la reciente aprobación del Plan Estratégico del Cooperativismo Agroalimentario de Castilla y León 2024-2027.
El plazo de presentación de solicitudes se extenderá hasta el próximo 23 de septiembre. Esta convocatoria afronta uno de los principales retos del Plan Estratégico, como se trata el de mejorar el tamaño de las cooperativas que, en algunos casos, compiten en inferioridad de condiciones dentro de los mercados. Un adecuado tamaño contribuye a que las entidades ganen poder negociador y mejoren así las rentas de sus socios, lo que ayudará al desarrollo sostenible en el mundo rural, según han explicado.
Dicha convocatoria refleja nueve líneas de ayudas para abordar el dimensionamiento desde múltiples perspectivas. Apoyarán las fusiones e integraciones entre dos o más cooperativistas, incluyendo los gastos del procedimiento, como los que afronten para la integración de los sistemas productivos. La cooperativa que resulte del proceso ha de contar con una cifra de negocio por encima de los 1,25 millones y sumar al menos 25 socios, entre otros requisitos.
Por su parte, las ayudas a la incorporación de nuevos socios facilitan que las cooperativas adquieran mayor tamaño gracias a sumar producciones que antes se comercializaban por otros canales.
Además, hay una serie de medidas que favorecen el crecimiento interno, como el nuevo apoyo que se presta a la comunicación, fundamental para otorgar mayor visibilidad a estas empresas y dar a conocer sus productos.
Igualmente, se establecen ayudas a los servicios de gestión de explotaciones, ya que algunas cooperativas detectan que, al jubilarse los socios, pierden el suministro de las producciones de esas explotaciones. Con este nuevo servicio, se pretende que el socio confíe en la cooperativa no solamente para comercializar productos, sino también para realizar otro tipo operaciones.
Con la misma finalidad, se refuerza la actividad de las cooperativas de explotación comunitaria de la tierra y del ganado, prestándolas apoyo para la contratación de personal especializado.
Para que el crecimiento de tamaño se produzca de manera planificada y ordenada, se contempla auxiliar los gastos derivados de la elaboración de planes estratégicos o planes directores, donde se plasmen las pautas del crecimiento de la cooperativa.
Además, se mantienen las actividades subvencionables de anteriores convocatorias, tales como las ayudas a la creación de nuevos productos o su introducción en nuevos mercados, las medidas de mejora profesional en innovación y en otras áreas de negocio, y también se apoyan las actividades de un mentor en la cooperativa, de tal modo que se facilita que las habilidades adquiridas tengan aplicación práctica y directa en la operativa de la empresa.