El Buzón anónimo de Denuncias del Fraude registró desde 2020, un total de 388 denuncias en Castilla y León por empleadas del hogar que prestaban sus servicios de forma irregular, de las que sólo 35 acabaron en infracción, con unas sanciones de 189.307 euros. Las denuncias derivaron en la Comunidad, en 562 actuaciones y 217 visitas de la inspección laboral, y junto a las 35 infracciones, se produjeron 51 requerimientos. Así aparece recogido en una respuesta del Gobierno al Senador Carles Mulet, quien urgió a reforzar la protección a este colectivo, que “en muchos casos sufre de abusos y desprotección”.
El informe indica que desde 2020, las denuncias en el buzón anónimo ascendieron a 86 en Valladolid; 73 en León y Salamanca, en ambos casos; 42 en Burgos; 31 en Zamora; 25 en Ávila; 21 en Palencia; 20 en Segovia; y 17 en Soria.
El resumen sobre el resultado de la inspección del grado de cumplimiento de la legislación laboral en las relaciones laborales de carácter especial del servicio del hogar familiar, indica que esas denuncias derivaron en ocho infracciones en Valladolid y Zamora, con sanciones por 45.528 y 41.227 euros, respectivamente. Asimismo, se produjeron cuatro infracciones en Ávila 19.379 euros de importe), Burgos (10.004 euros), Salamanca (22.516) y Soria (27,179); y una en León (10.001), Palencia (3.126) y Segovia (10.346).