UGT Castilla y León ha manifestado "su más profundo pesar por los dos fallecimientos provocados en los incendios de Zamora, así como por las personas trabajadoras del Operativo de extinción que han resultado heridas", por medio de un comunicado. También han trasladado sus condolencias por el reciente fallecimiento de los dos trabajadores de Salamanca y de León que perdieron la vida mientras realizaban labores de mantenimiento de ascensores.
Y es que, según los datos de UGT, el primer semestre de 2022 ha superado ya las cifras de siniestralidad prepandémicas. De hecho, si comparamos los datos del 2022 con los del primer semestre del 2019 se confirma que se han superado ligeramente (un 1,5%) las cifras anteriores a la pandemia. En el primer semestre del 2019, hubo 14.238 accidentes de trabajo en jornada e in itinere frente a los 14.424 producidos en lo que va de año.
Asimismo, en el primer semestre del año 2022, 13.187 personas trabajadoras de Castilla y León han sufrido un accidente de trabajo con baja en jornada laboral. Se trata de un 19,85% más que en el mismo periodo del año anterior. En cuanto a los accidentes in itinere, se han visto afectados 1237 trabajadores, un 8,51% más que el pasado año. Por tanto, en total, 14.424 trabajadores castellanos y leoneses han sufrido un accidente con baja en este semestre.
Si sumamos los accidentes de trabajo que han causado una lesión al trabajador sin haber requerido baja médica (16.989) podemos concluir que, en los 6 primeros meses de este año, 31.413 castellanos y leoneses han sufrido un accidente como consecuencia de su trabajo.
Destaca el hecho de que el incremento de los accidentes de trabajo con baja en jornada laboral se ha producido en todos los grados. Así, los leves se han incrementado un 19,82%, los graves un 17,44%, y los mortales un 52,94% (26 trabajadores han perdido la vida en su puesto de trabajo y 4 mientras se dirigían o volvían del mismo).
Por sectores, territorios, sexo y procedencia
Además, por sectores de actividad, la construcción es el sector que ha experimentado el mayor crecimiento (29,31%), seguido por el sector agrario (21,54%), servicios (21,35%) e industria (11,70%). Y, de la misma manera, si centramos la atención en su gravedad, desde la organización sindical han alertado sobre el notable crecimiento de la mortalidad en todos los sectores.
Así, el sector agrario ha experimentado un crecimiento de víctimas mortales del 300%, industria y construcción del 50% y servicios del 30%. Por su parte, los accidentes de trabajo graves han crecido en el sector agrario (71,73%), construcción (13,33%) y servicios (29,27%). Tan sólo industria ha visto reducido este tipo de siniestros en un 17,89%.
También, atendiendo a la distribución territorial de los accidentes de trabajo con baja en jornada de trabajo, se pueden observar incrementos en las nueve provincias de Castilla y León. Destaca Valladolid con un repunte del 42,6%, seguida de Zamora (26,81%), Ávila, Salamanca y Segovia (superiores al 15%) y León, Palencia y Burgos con incrementos en torno al 10%.
De igual manera, los accidentes "in itinere" también se han incrementado. Se han visto afectados 1237 trabajadores, un 8,51% más que el pasado año, y se ha producido un fuerte aumento en los accidentes graves (77,78%).
En cuanto a las enfermedades profesionales, si bien se ha producido un incremento del 22,22% en la declaración de las mismas, tan solo se han comunicado 253 partes de enfermedad profesional con baja a lo largo del semestre, cifra que sigue estando muy por debajo de las que se notificaban antes de la entrada en vigor del nuevo cuadro de enfermedades profesionales en España (RD 1299/2006, de 10 de noviembre). Castilla y León notifican un 73% menos de enfermedades profesionales que en el año 2005.
Si analizamos la distribución de accidentes de trabajo con baja en jornada laboral en función del sexo, 7 de cada 10 accidentes de trabajo con baja los sufren los hombres. 76% de los graves y el 96% de los mortales, proporción que también se da en el conjunto del país. Las enfermedades profesionales con baja, no obstante, afectan por igual a hombres y mujeres.
Si atendemos a la nacionalidad, del total de accidentes de trabajo con baja acontecidos durante este semestre en Castilla y León, el 8,9% los han sufrido trabajadores extranjeros.
Exigencias de la secretaria de Salud laboral de UGTCyL
Para M.ª Fe Muñiz, secretaria de salud laboral y Medio Ambiente de UGT Castilla y León, "la mortalidad en el trabajo en nuestra región es, sin duda, el peor dato que venimos soportando desde siempre, ya que el índice de incidencia de los accidentes de trabajo mortales en Castilla y León dobla el índice de incidencia nacional".
Cabe recordar que, de acuerdo con el informe elaborado por UGT, a los 26 trabajadores que han perdido la vida en Castilla y León en su puesto de trabajo, se suman 4 accidentes in itinere mortales, llegando a 30 los trabajadores fallecidos con ocasión o por motivo del trabajo. De ellos, 13 corresponden a lesiones no traumáticas, 5 a accidentes de tráfico, 3 a caídas desde altura, 2 por aplastamiento, 1 sepultamiento, 1 por caída de un objeto sobre el trabajador y 1 por exposición a agentes biológicos.
Por otra parte, teniendo en cuenta la infranotificación de los accidentes laborales por parte de los trabajadores autónomos, sobre todo en los casos leves, destaca que, de los 26 accidentes de trabajo mortales mencionados anteriormente, 7 correspondieron a trabajadores autónomos.
Por eso, para la secretaria de Salud laboral de UGTCyL, "estos datos ponen de manifiesto la penosa situación que soporta Castilla y León en materia de siniestralidad laboral y confirma que la salud laboral de las personas trabajadoras sigue siendo una cuestión menor para el Gobierno de Castilla y León".
En consecuencia, a la luz de estos datos, desde UGT Castilla y León exigen la puesta en marcha de las medidas acordadas en el VI Acuerdo para la Prevención de Riesgos Laborales en Castilla y León firmado el pasado año, y que aún está pendiente de desarrollo y reclaman "mayor sensibilidad al Gobierno de la Comunidad".
En el mismo sentido, la organización sindical insta a la Administración a que "abandone la actitud de indiferencia que parece haberse instalado en los últimos tiempos hacia la seguridad y salud en el trabajo, porque la vida y el bienestar de las personas deben estar por encima de cualquier consideración política o ideológica".