El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha hecho público hoy los datos de creación de sociedades mercantiles a cierre de 2021. Un año que se cerró en positivo tanto en Castilla y León como en el resto de España, si bien es cierto que sin recuperar aún el ritmo previo a la irrupción del coronavirus y muy lejos de los datos anteriores a la crisis de 2008.
En la Comunidad se creó un 23,1% más de estas hasta casi las 2.700 con un capital suscrito de 142,42 millones de euros. Una cifra que se aleja algo más de cuatro puntos de la media nacional, con un incremento de casi el 28% durante el pasado ejercicio hasta las 101.134 empresas y un capital suscrito de 5.041 millones de euros.
El histórico de este indicador muestra el cambio de tendencia tras la irrupción del coronavirus, con una caída de 623 de 2019 a 2020.
El dato que publica hoy el INE tiene especial relevancia porque se trata del primer año tras la irrupción de la pandemia en el que la tendencia se revierte y cierra en positivo, tras las caídas del 1,2% y del 15,7% registradas en 2019 y en 2020 respectivamente.
La Comunidad no sale bien parada en lo que respecta al número de disolución de empresas durante 2021, dado que con 1.140 (casi un 22% más que en 2020), se sitúa casi cinco puntos por encima de la media nacional, donde finiquitaron su actividad 23.778 sociedades.
Dominio de las sociedades limitadas
En este informe del INE destaca que de todas las sociedades creadas durante el pasado ejercicio en Castilla y León, sólo seis fueron sociedades anónimas -que exige un capital mínimo de 60.000 euros para su constitución-, mientras que el resto fueron sociedades limitadas, con un capital suscrito de 140,56 millones de euros.
En lo que respecta al resto de España, Madrid lidera no sólo la creación de estas sociedades con casi 24.000 nuevas, sino también la cifra de empresas disueltas con 7.373. En Cataluña se crearon algo más de 19.000 nuevas sociedades de capital y en Andalucía lo hicieron casi 17.500.
Por el contrario, La Rioja, Navarra y Cantabria fueron las comunidades autónomas donde menos se crearon pero también en el caso de las dos primeras donde menos sociedades cerraron.