Un grupo de empresas de Castilla y León, encabezadas por Granalu y con la colaboración de la asociación Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL), se han unido para ayudar a las víctimas de la guerra de Ucrania a través del envío de material de primera necesidad a Polonia destinado a los refugiados en ese país.
Ayer llegó al Polideportivo de Mosir en la localidad polaca de Lodz, que hace de recepción de materiales humanitarios, un semirremolque de Granalu cargado con 11.000 kilos de ropa, juguetes, alimentos y productos de higiene, con el que se quiere ayudar a los miles de personas que han tenido que huir de sus casas en Ucrania a causa de la invasión rusa.
Tanto el Ayuntamiento de Lodz como el pueblo ucraniano han agradecido enormemente el gesto el gesto que, según ha indicado el director de EFCL, Eduardo Estévez, es una pequeña aportación para ayudar a las familias ucranianas afectadas por el conflicto, del que deseamos su pronto final.
Estévez también agradeció a Granalu esta iniciativa, así como al resto de empresas que han querido colaborar con esta actuación solidaria y entre las que se encuentran Hijos de Teodoro Muñoz, Cancio, Dulces el Toro, Montenevado, Terrabuey y Eufon, todas ellas socias de EFCL.
También han participado en esta donación Hyva, Fradejas, Hortalizas las Adoberas, Cuellarana de Patatas, Tabuenca, Mariano Rico, Federación Española de Belenistas, G-Sancho, GLS Acueducto y Cuéllar, Rodríguez Sacristán, CyP Brands, Grañeda, Colorbaby y Geoda Design, así como los vecinos de la comarca del Carracillo en Segovia, a través de donativos.
Por su parte, Alberto Guijarro, director general de Granalu, destacó la ayuda recibida por parte de todas estas empresas participantes así como de EFCL para poder llevar a cabo esta iniciativa solidaria.
Empresa familiar de Castilla y León
Fundada en junio de 1997 con el objetivo de trabajar para favorecer la continuidad de las empresas familiares de la región, EFCL engloba a más de 160 empresas familiares de toda la región líderes en sus respectivos sectores, cuya facturación global equivale al 19,50 por ciento del PIB y dan empleo al 10,5 por ciento de la población ocupada de Castilla y León en el sector privado.