La fiebre por invertir en plantas que generen energía renovable y promuevan una economía circular, llega de nuevo a Segovia. La empresa española Libergia, especializada en el desarrollo, coinversión, construcción y puesta en marcha de proyectos industriales, aterriza en Carbonero el Mayor para levantar unas instalaciones que permitirán dar un destino renovable a los desechos agrícolas y ganaderos de la zona.
La nueva planta, que contará con una inversión de 50 millones de euros y creará 20 puestos de trabajo directos y 50 indirectos, está previsto entre en funcionamiento en año y medio.
Esta planta de biogás permitirá dar una salida medioambiental a medio millón de toneladas de desperdicios orgánicos al año para convertirlos en energía, según una información que recoge Ical.
La energía resultante irá destinada sobre todo al transporte por carretera, que permitirá ahorrar las emisiones de carbono de cerca de 200.000 vehículos al año.
El CEO de Libergia, José Carlos Gil, ha indicado que se tratará del "primer proyecto" de esta envergadura en España "y casi en Europa", dado el nivel tecnológico con el que contarán las instalaciones.
Un proyecto que ha contado con el impulso de la Federación Empresarial Segoviana (FES) y su Agrupación de Productores de Porcino de Segovia (Aporse), así como con el apoyo de la Diputación Provincial de Segovia y del Ayuntamiento de Carbonero el Mayor.
El tratamiento de los desechos animales y agrícolas y su conversión en energía supone "solucionar un problema", tal y como ha indicado el presidente de FES, Andrés Ortega.
Los olores de las granjas y de sus residuos orgánicos pasarán a convertirse en energía limpia, mejorando así, además, la convivencia de la zona.
En la misma línea se ha pronunciado María Ángeles García, alcaldesa de Carbonero el Mayor, quien ha recalcado que esta planta de biogás es "un proyecto innovador que generará empleo y riqueza para la zona, y sin necesitar de financiación pública".