Iberdrola, a través de su fundación España, y la Fundación Princesa Kristina de Noruega han firmado un acuerdo de colaboración para iluminar el complejo de la capilla de San Olav, una singular iglesia vikinga situada en el Valle de los Lobos, en el municipio burgalés de Covarrubias.

En el acto han estado presentes el embajador de Noruega en España, Nils Haugstveit, el presidente de la Fundación Iberdrola España, Fernando García, el director de la fundación, Ramón Castresana, y el presidente de la Fundación Princesa Kristina de Noruega, Manuel Medina.

Manuel Medina, presidente de la Fundación Princesa Kristina de Noruega, ha agradecido a título personal esta colaboración porque "San Olav y su ermita brillarán, por fin, con luz propia". Igualmente, ha querido acentuar el enclave paisajístico natural en el que se ubica. A su vez, Fernando García, presidente de la Fundación Iberdrola España, ha destacado "la singularidad de este proyecto, tanto por su historia como de la propia capilla", así como la "importancia de apostar por el respeto por el medioambiente a través de las energías verdes".

Foto de familia en la firma del convenio para la iluminación de la capilla de San Olav Iberdrola null

Castilla y León cobija una auténtica iglesia vikinga con una fascinante historia, se trata de la capilla de San Olav, una ermita moderna y única situada en una colina cerca del pueblo de Covarrubias. Esta joya arquitectónica, la única de estas características de España, homenajea a la princesa Kristina de Noruega, que llegó a España para casarse con el infante Felipe, hermano de Alfonso X el Sabio, pero cuyo destino la llevó a una vida breve y sin descendencia.

Historia de la Capilla

Esta ermita tiene su origen en el siglo XXI y cuenta la historia de la princesa Kristina de Noruega, hija de Haakon Haakonsson 'el viejo', un personaje de relevancia en la historia medieval noruega y española. La princesa Kristina viajó hasta España en el siglo XIII para casarse con el infante de Castilla, Felipe, hermano del Rey Alfonso X el Sabio.

El casamiento duró poco tiempo, pues la princesa murió en Sevilla, al parecer por las altas temperaturas de la ciudad, a las que no llegó a acostumbrarse. El infante Felipe de Castilla decidió entonces que la sepultaran en la Colegiata de Covarrubias, donde él había sido abad.

El 18 de septiembre de 2011 tuvo lugar la inauguración de la Capilla de San Olav, realizada en acero laminado y madera, promovida por la Fundación Princesa Kristina de Noruega, el gobierno noruego y la Junta de Castilla y León, cumpliéndose así la promesa que le hizo el infante de construir un templo en honor a San Olav, santo patrono de Noruega, a quién la princesa Kristina profesaba una gran devoción, pero que quedó sin cumplir por su prematura muerte.