Tomas-Hidalgo

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Opinión

Los españoles no están en los despachos, están en las urnas

4 junio, 2018 11:47

Es legítimo ser presidente, Sr Sánchez, pero no a costa de los españoles, no con aquellos que quieren liquidar España.

Este es parte del discurso de Albert Rivera con el que estoy profundamente de acuerdo.

He leído por ahí, que esta moción era necesaria, que una vez se hiciese pública la sentencia, y confirmada judicialmente la existencia de la caja B del PP, Rajoy debía irse, incluso reconozco, que la moción presentada a falta de que Rajoy asumiese su responsabilidad política y disolviese el Parlamento convocando unas elecciones, para que los españoles, y todos los españoles, hablasen en la urnas, era lo mejor que le podía pasar a esta sociedad. Queda obvio que la irresponsabilidad de no dimitir (obligando a Sánchez a enfrentarse con las dificultades e inseguridad política para conseguir ser nombrado presidente, y que todos los españoles vamos a sufrir) inhabilita a Rajoy como político y el Partido Popular no va a tardar en sentirlo.

Seamos claros, el líder socialista quiere llegar al poder con aquellos que están en contra de España y de los españoles, eso es a mi entender como si hubiese dado poder, superioridad, fuerza, dominación, impunidad absoluta, a los maestros imputados por humillar a hijos de guardias civiles.

O al energúmeno que hace unos días apedreó los cristales de la vivienda del concejal de C’s de Sitges Miguel Ángel Bastenier.

O aquella que insinuó violasen en grupo a Inés Arrimadas.

O como ese que deseó la muerte de Carlos Carrizosa por haber quitado un símbolo soberanista.

Ha llegado Sánchez, con su acto, a dotar de poder, superioridad, fuerza, dominación e impunidad absoluta sobre sus víctimas a los etarras que han asesinado o herido, secuestrado, chantajeado, oprimido durante estos 58 años y que en junio de 2009 cifraba los heridos en unos 16.000. Unas 42.000 personas con diversos tipos de amenazas y entre 857 y 867 víctimas mortales, muchas de ellas políticos del PSOE.

Pedro ha puesto a todos los españoles constitucionalistas a dormir con sus enemigos o irse al sofá.

Pero sepa el señor Pedro Sánchez que en los despachos donde ha conseguido todos esos apoyos, en esos despachos no están todos los españoles, todos esperaban y esperarán al pie de urna a que se le devuelva su derecho a decidir sobre su destino como sociedad democrática.