Necrofagia: Alimentarse con cadáveres, figuradamente un necrófago también lo es aquél que se sirve de los muertos para buscar algún rédito y si ese rédito es ganar un proceso electoral a ese y al proceso utilizado se le puede denominar en el caso de las elecciones vascas que están por venir “electo-necrófago y electo-necrofagia”
El acuerdo alcanzado por el PSOE y Podemos con Bildu “quien lo iba a decir, el PSOE pactando con Bildu”. jamás lo hubiésemos imaginado, ¿se entiende la ironía. Negro sobre blanco para acordar la anulación de la Reforma Laboral del PP, parece ser que, alguno de estos partidos ya ha hecho su ERE particular bajo esta Ley, y ahora, que ya no la necesitan, se la cargan.
O quizás el ERE se lo van a hacer al PNV en su ámbito de poder. Escucho aquí, allá y a culla y lo veo factible, por el poder en el Gobierno de España se aceptó la abstención y el voto de aquellos que quieren destruirla, por el poder se llegó a un acuerdo con Bildu en Navarra. Por el poder en el país vasco…qué no harían por ese poder.
Puede darse la casualidad que tras el proceso electoral el PNV necesite los votos de la derecha constitucional, que puede ser la llave de esa gobernabilidad. Se acordarán del apoyo “venta de los votos” del PNV al PSOE de Sánchez. Y entonces, no sería el momento en el que el PNV tuviese que rendir cuentas de “cuantos nogales atizó y nueces recogió”.
En este proceso electoral presumiblemente habrá muertos sí, muertos, pero a priori; a priori por que aún no sabemos a ciencia cierta cuál es el número que nos deja “el bicho”. Unos, el PNV en la encrucijada, desesperado por la plausible pérdida de poder, echará la culpa al PSOE y Podemos de los muertos fallecidos durante el reino de “el bicho” por contra, los otros, el triunvirato siniestro, estampará en la mismísima cara de urkullu los cadáveres malolientes de los dos trabajadores, no por donde están enterrados, sino por el tiempo que llevan sepultados en el basurero de Zaldibar y la sospecha de la mala gestión de dicha instalación, mal huele eso, tanto que ha llegado a Europa sus nauseabundos aromas a corrupción. Otra nefasta gestión.
Pero, salvo alguna excepción constitucionalista y debido al pacto con Bildu, el PSOE dejará de reivindicar la memoria de los asesinados por ETA y ya no solo la memoria de los asesinados y reconocidos en sentencia judicial que es lo mínimo, hay otros muertos y damnificados que, además, no han tenido un juicio, y esa exigencia que debería ser previa que se supone ser elemento inexcusable de ese pacto y de otros con Bildu: aclarar esas muertes y delitos sin resolver, será sepultado de paso, también, en el basurero de Zaldibar. Y sino, que se lo pregunten a Idoia Mendía, secretaria de los socialistas vascos, casi entierran su casa en pintura roja y pasquines “Asesina” se leía en ellos. La callada por respuesta para defenderla, no se puede esperar otra cosa.
Sí, en este proceso alguien retozará con muertos para sacar réditos, pero ni para eso se tendrán en cuenta los que ETA asesinó, ya no serán unos muertos dignos, ni los suyos, arma política del Partido Socialista, se los estaría echando en cara a su socio.