Vivimos cada día más inmersos en la sabiduría de las cucarachas, cuando la energía es limitada y los ciudadanos no hacemos más que sobrevivir, aprendemos que la única forma de recuperar algo de energía es parar en seco y esperar.
El dinero hace a las personas ricas, el conocimiento hace personas sabias, pero sólo la humildad hace grandes personas. Lo malo es encontrarse con la realidad imperante y tener por respuesta a un cansaliebres o como decíamos en la universidad a un delegado de clase pero de los que no se atreven a hablar a los profesores. Al final mal negocio para todos.
Decía Sócrates: "Sin palabras para conversar en el ágora y pensar con los otros sobre lo bueno y lo justo no habría ya ciudadanos, sino bárbaros: seres dotados de voz, pero sin juicio y sin logos". Hoy las voces apenas dejan oír las palabras; Sócrates está muerto y el pensamiento no goza de buena salud. Nadie sabe ya hasta cuándo.
Hubo una época en España en que a los sitios se iba educado de casa y no se exigía a los centros educativos que se hiciera el trabajo de los padres. La zapatilla era un instrumento homologado. Ahora son tiempos en los que campa la idelología del odio y la envidia sostenibles.
Con protagonistas oportunistas que disfrutan de una vida fácil a expensas del sufrimiento y la miseria de los demás. Tiempos en que los fracasados, los envidiosos y los tiranos tienen su espacio. Mientras, el ciudadano normal, de a pie, calla. Pero cada día está más hasta la coronilla. En cualquier esquina se oyen los más tradicionales improperios, ahora que podemos abrir las ventanas...
Nuestro gobierno se ha constituido en promotor del blanqueo de la delincuencia de todo tipo desde la política de la que no se esconde, a la de las calles que no disimula.
Los antecedentes penales pueden ser un problema a la hora de obtener la nacionalidad española, sacar o renovar permisos de residencia aunque ahora te explicamos cómo solicitar la cancelación de los antecedentes penales. Así día tras día el viandante puede observar de cerca a mil y un altercados cotidianos cuyo nivel de violencia no es el de siempre.
Situaciones de las que somos testigos, y que en el subconsciente pensamos en el "como siempre esto no tiene remedio", mientras vemos un telediario anodino o más bien tristón, repetitivo, empapelado de cada día más corrupción y de enfrentamientos partidistas y plandemia. Todo ello da para pensar y comparar a nuestros políticos y a nuestro congreso con uno de tantos mercadillos de nuestra geografía.
El pulso con Argelia como consecuencia de las cosas chulísimas que se nos ocurren ha reducido a la mitad el gas que nos llega. La industria cerámica pide diplomacia urgente antes de que Argelia cambie el azulejo español por el italiano.
Se perderán ingresos por 90 millones y muchos puestos de trabajo. Eso en uno de los sectores de la bolsa de 3.000 millones de euros de comercio con Argelia. Pero una sorpresa chulísima más es que el ritmo de compra de gas ruso se ha disparado en mayo en un 52 por ciento, y se ha acelerado en pleno ataque de Rusia a Ucrania, justo después de mostrarnos como grandes defensores de los ucranianos. Hemos comprado 3.289 GWh de gas natural ruso en el mes de mayo. Ese gas es una de las grandes fuentes de financiación de Putin.
De lo que deducimos cada día más el final de la película. No podemos negar que el uso de la mentira por parte de este gobierno es transparente se ve la verdad a la legua con lo que vamos perdiendo toda la credibilidad internacional y nacional que podíamos tener, mientras que parece que la mano que mece la cuna son los USA que sacan todo el beneficio que pueden. El próximo invierno nos vamos a enterar de lo que es estar congelados en casa pero la culpa será de otro.
Aunque todavía el calor este verano parece que no aprieta, el hambre no perdona y los sueldos cada día dan para menos nos digan o prometan lo que se les ocurra. Los asaltos con violencia a la propiedad privada o pública cada día se ven más cotidianos, como los asaltos a las carteras y a las personas indefensas en la vía pública sin importar la edad.
Las muertes y los suicidios tampoco paran de aumentar, incluso de gente en edad de merecer y trabajar. La clase política chulísima que nos dirige se han mudado a sitios mejores, su barrio natural que huele a repollo y pis de perro en las esquinas ya no les satisfacía. Son tan exquisitos y vagos que se van a barrios que aunque se laven poco huelen a Chanel. Son ricos.
El falso multiculturalismo es simplemente islamización. Aquí no llegan franceses, alemanes, ingleses, norteamericanos, australianos o japoneses de alto nivel y con carreras universitarias. Aquí sólo llegan delincuentes marroquíes, argelinos y subsaharianos sin estudios, ni oficio ni beneficio.
Es patético que nos enteremos dos semanas después, que degollaron en Marsella, a la salida de un colegio católico, a un médico militar en presencia de sus dos hijos por un ser iluminado del norte de Africa, y más patético que no nos enteremos de lo que acontece todos los días en España donde los délitos, asesinatos y tiroteos ni se informan en las noticias, salvo si entran en patinete en una iglesia.
Habrá que tomarse las cosas con resilencia, inclusión y sostenibilidad como dicen ahora, con capacidad para asumir con flexibilidad las situaciones límite y sobreponerse a ellas. Otros lo llamaríamos estoicismo o "ajo y agua".
Miremos donde miremos no se ve luz, ni siquiera un pequeño resquicio. España se rompe cada día un poco más. Estamos en la España de los desamparados. El concepto de patria que se ha tratado de denostar por todos los medios es lo que hace que un país reme en la misma dirección y destaque sobre otros. Pero aquí se ha tolerado lo intolerable, una vez y otra también, para contentar a unos pocos miserables.
De cara al futuro hay que estar atento a la ley que presenta Holanda que reduce las emisiones agrícolas para 2.030, hasta en un 70 por ciento en 131 zonas del país y que terminará expulsando al agricultor de su propia tierra. Se generará hambre. La maquinaría agrícola no es muy sustituible por una batería eléctrica. Las emisiones de los tractores son mucho mayores que las de los aviones de los políticos. La visita de Ursula von der Leyen a Ucrania paseando por las calles tranquilamente nos hace preguntar si están en un país en guerra o de verbena.
Mucho se ha perdido en las mareas del tiempo pero aun mucho es recordado. El tiempo avanza inexorablemente, reduciendo los puntos clave de la historia a cosas insignificantes.
El tiempo es el enemigo mortal del hombre, ya que arruina sus logros y borra su memoria sin una segunda oportunidad. Quizá al final lo que más nos pone de mal humor es como manejan el tiempo algunos, para que al final los que tienen que pagar no paguen, y para que los demás olvidemos lo que no teníamos que haber permitido.
Mientras la historia se convierte en leyenda, la leyenda se convierte en mito, el mito se vuelve fábula, y las fábulas son olvidadas poco a poco. Como la historia de Luis Cándelas que ya nadie sabe de qué va, pero seguro que fue famoso por trincar todo lo que pudo y aunque hizo mucho mal a inocentes, ya a nadie le importa.