Hoy en día parece que vivimos en un mundo inculto y complejo, lleno de ruido y con muy poco criterio, en el que los valores desaparecen ayudados por unas redes sociales que crean mucha confusión, porque no siempre el receptor filtra adecuadamente. Hemos llegado a un punto en que lo que se muestra en la pantalla crea su propio universo al margen de la realidad y moralidad verdadera. Thomas Mann afirmaba que "la tolerancia es un crimen cuando lo que se tolera es la maldad"...
Los medios audiovisuales podrían ser un extraordinario medio para aumentar el nivel cultural de la mayoría, pero no pueden serlo porque nos domina la cultura de la degradación y del cachondeo, del todo vale frente a los verdaderos valores, y ello socava la realidad y nos conduce a la decadencia más absoluta. Aunque somos conscientes de lo que se nos ofrece en muchas ocasiones es una mera pantomima se acepta muchas veces por un miedo irracional que empieza a inundar la sociedad. La verdad se nos oculta hasta en su camino para llegar a ella. Si dejas de luchar, te han silenciado y por ello lo han conseguido. Es como si nos hubieran eliminado ya que el relevo no es más que un ejército de sofá-fighters indomables que ni caminan.
Esta última semana hemos asistido a tal cantidad de despropósitos por parte de los que nos gobiernan que parece que nos va a estallar la cabeza. Cada día quieren que nuestro papo sea más grande para tragar lo que no se puede tragar. La historia está escrita. A pesar de las amenazas de la ignominiosa Ursula von der Brujen a los italianos. Las podemos tildar de indignas y sucias pero dejan patente lo que importamos para los que nos gobiernan desde la UE y el nivel de descaro de éstos. Los italianos han votada nada más y nada menos al sentido común que va en contra de la ruin hegemonía progresista. Sentido común que no es más que la defensa de nuestros valores más tradicionales de la patria como es la nación, la familia y la cruz. Pilares de la civilización occidental. Otra Europa es imposible. Los ciudadanos empiezan a darse cuenta de cómo la siniestra globalista los ha suicidado energéticamente, ha abierto las fronteras a indeseables, nos ha desarmado y ha conseguido que la gente viva peor y con más miedo, todo ello sazonado con la plandemia. Este falso progresismo dirigido ha destruido la convivencia y las democracias para implementar una dictadura globalista. Al final parece que los británicos tenían razón y que la UE va a ser una estafa para seguir siendo ricos los mismos.
Las cosas chulísimas han sobrepasado esta semana el listón como la propuesta de los ataúdes de cartón y los crematorios fuera de las ciudades para según el partido gobernante se ofrezcan unos servicios funerarios ecológicos y sostenibles. Para rizarlo todavía más la Yoli aseguraba que consumir fresas fuera de temporada es explotar a la otra parte del mundo dando así muestras una vez más que no sabe de nada. Un discurso hueco, como todos los chulísimos que se le ocurren. Habla de crear empleos de calidad y no dice cómo. No lo dice porque no tiene idea de nada. Keynes está temblando en su tumba ante el nuevo pacto social verde, feminista, pacifista y, sobre todo, de un país que es feliz según la Yoli. Da vergüenza ajena hasta los gatos. Lo que está cada día más claro es que sólo hay dos ciclos económicos la derecha creando riqueza y la izquierda fundiéndosela. Cuando te quitan el 50 por ciento de lo que ganas, el 21 por ciento de lo que gastas, el 30 por ciento de lo que heredas eso no es libertad ni estado del bienestar, es esclavitud.
En España hay mucho apesebrado, votante y político de dame una paguita y roba lo que quieras que llaman trastornados a los votantes italianos que nos llevan cada día más al pozo de la mierda. En Italia no ha convencido el discurso de que los niños tengan derecho a acostarse con quién sea, como nos deleitó con sus declaraciones, de las que no se desdice y sus chupipandis apoyan, nuestra ninistra que no sirve para na. Mientras nuestro prescidente ha vuelto de la ONU con 573 millones de euros menos en las arcas del Estado que habría que ver si estaban presupuestados. Mucha ejemplaridad pero todavía no nos han explicado que había en las cuarenta maletas de la perseguida por narcotráfico en medio mundo. De momento seguimos tapando.
En la lectura de presentación del Banco de España en la Bolsa de Madrid se puede ver que, en el caso español, hay riesgos de deterioro importante. Esto no es fruto de la casualidad, sino de la ausencia de una política clara, fiable y ortodoxa que está empujando a nuestra economía al caos más absoluto. No hay capacidad ni proyecto alguno de país tan sólo campaña electoral pura y dura. Aunque España se viera menos afectada por un corte de suministro de gas ruso, se vería impactada indirectamente por la caída de las exportaciones a nuestros socios al empobrecerse éstos por esta causa. Los mismos que te dicen que te compres un coche eléctrico son los que te dicen que van a programar cortes de electricidad diarios.
Barcelonichistán ha causado protagonismo por sus asesinatos diarios, saqueos de comercios, destrozos de vehículos y mobiliario urbano. Su alcaldesa carece de todo respeto por sus movimientos y respuestas cabe preguntarse de qué es dependiente realmente. Lo peor es que nos estamos acostumbrando a la violencia. Estos si comedores de jamón en la intimidad también fueron los que asaltaron el estadio del Español el día anterior. Multiculuralidad y gente que no habla español que es lo que querían en Cataluña, donde las bárbaras hordas de jóvenes foráneos no respetan nada de la sociedad que les ha dado todo, y donde ni las autoridades intentan siquiera controlarlos.
La ONU pide a los educadores que enseñen valores modernos y eliminen cualquier influencia de los padres y de las culturas tradicionales en la formación de los niños menos a los que no comen jamón. La misma ONU que nos avisa de la próxima plandemia que va a ser una hambruna y que anda tras que nos implanten un chip para no estar al margen de la sociedad. Es la agenda 2030. Otra barbaridad más es el friganismo que es la última dieta hipster que se basa en coger comida de la basura. Ni la paleo ni la alcalina. La última moda se sirve en los contenedores de basura. No se trata de una carencia de medios económicos para llevarse el pan a la boca, es una nueva tendencia sostenible y sus adeptos se hacen llamar freegans. Hacemos así aceptable lo inaceptabe que es la miseria. Es como decir lo que no quisiste decir pero lo estás haciendo.
En Irán donde según su religión una mujer vale menos que una cabra, las mujeres se están jugando su libertad quitándose el hijab, mientras en Barcelona las feministas, de sobaco con matojo y puño en alto, dan cursos para ponérselo. En Ceuta se ha instaurado por primera vez como asignatura el Islam. El cambio timoclimático carece de cualquier base científica, ni un solo político sabe responder a que lo produce, ni la cantidad de CO2 que hay en la atmósfera mientras los otros dos tercios del planeta hacen lo que les da la gana. En cuanto a la educación el que un profesor en Cataluñistán presuma en público de hacer bulling a un alumno dice mucho de la degeneración que está alcanzando cierto sector del profesorado y de la sociedad catalana con el beneplácito de los que nos gobiernan.
Este relato selectivo a su manera, sometido a una doble censura del poder económico y del poder político que crean tendencias de todo tipo, se come la realidad, la neutraliza o la ignora. Se multiplican así las maneras de verla según convenga. Este proceso de contaminación de la información por el espectáculo de lo banal está alcanzado cotas importantes. Ello a su vez nos puede también hacer pensar que convivimos desde hace años cada vez más con una política basura, una economía basura, un periodismo basura, un cine basura, cuyo resultado es la decadencia en la que nos toca vivir.
La humillación y la mentira vende y atrae y todo lo envuelve, porque tranquiliza pues podemos pensar que otros lo están pasando peor. Los méritos venden cada día menos que los defectos, de la misma forma que las malas noticias venden más que las buenas. El resultado de todo esto es la retribalización y la analfabetización intelectual y social de cualquier tendencia. Estamos asistiendo a la deconstrucción del individuo occidental, en este proceso de huida de la responsabilidad individual todo es culpa de los demás.
Por supuesto esto es un desastre pensando en el futuro no muy halagüeño que nos espera para la mayoría ante un mundo global, o una falsa nueva normalidad del paraíso de Davos "no tendréis nada pero seréis felices...", cuyos protagonistas serán unos pocos cada vez más especializados, alfabetizados y muy ricos, mientras los demás esperarán en el charco. Así nos va con el panorama económico y político actual del que parece, viendo los hechos que lo adornan, no vamos a salir, al menos muy bien parados... Darwin ya constató en tiempos que "la progresiva degeneración de la especie humana se percibe claramente en que cada vez nos engañan personas con menos talento"... Esta mañana al preparar la caldera de la calefacción para el invierno a algunos nos ha venido a la mente la poco recordada aunque presente propaganda de guerra: "ni un hogar sin lumbre, ni un español sin pan". No somos más que nadie ni menos que nadie, tan sólo somos personas que desean vivir en paz, igualdad y libertad además de trabajar y llevarse un plato a la boca. Sé que pedimos demasiado.