La situación del PP en Salamanca es la de una máquina rota, un instrumento demasiado tocado y que desafina, así es como lo deja el Sr. Iglesias, quien ha sido presidente durante demasiado tiempo, ha sido el personaje con suerte que estaba en el momento adecuado para obtener el puesto inadecuado, pero esa ha sido su flor política en todo momento. Sin capacidad, insulso, descarnado y vengativo, con actitudes y modos de actuar poco adecuados, que han desarrollado unos modelos utilizados por propios y extraños, con el único requisito de loar al dueño de las llaves, hasta que... Llevaba demasiado tiempo con problemas que derivaban al terreno público y, poco le ha pasado para lo mucho que ha nadado en las procelosas aguas que él mismo enmugrió y que le obligaron, ya en las pasadas elecciones, a ir escondido en listas municipales para no ser visto y salir elegido, no por él sino por el partido.
 
La cabeza al ayuntamiento parece sólida, perfectamente colocada y poco salpicada por el modo de actuar el presidente despuesto; pero, con un equipo sin formar y de difícil estructuración, que aún no es públicamente conocido, lo que concede al PP Salmantino el oxígeno que su expresidente le resta.
 
Por suerte, el PSOE, como siempre, parece que no quiera luchar por la victoria y se encuentra en disputas "democráticas" que le restan y no le suman entre Sole, una persona preparada, sólida y curtida en las lides políticas, y José Luis, un muchacho que lleva demasiado tiempo en la política para lo poco que lleva en el mundo laboral, que está perfectamente preparado, pero no acaba de conseguir la zarpa que le permita ganar.
 
Podemos y las chupipandis femichonis no existen ya en el panorma político local, pero no dudes que se moverán para salir en alguna foto que les permita lucir el palmito.
 
VOX, quien bien podría ser el bastón de mando del PP, parece desaparecido, es el que más puede ganar con un candidato adecuado y con energía de lucha, pero siguen deshojando la margarita en pos de un canidadato sumiso y poco enérgico que no permitirá obtener las posiciones que se esperaban de la formación... veremos qué cara nos ponen.
 
Con este panorama, sin aprovechar nadie la caída, por no decir el derrumbre, del Sr. Iglesias, ni de rentabilizar la imagen que este tenía y deja en el partido popular en favor de un cambio posible, en el que el gobierno municipal estuviese formado por el PP y Vox, para demostrar que sí se puede, que no es ningún desdoro y que peor será siempre la sumisión del PSOE al comunismo de Podemos que la colaboración sincera entre dos derechas democráticas con posiciones ideológicas similares pero dispares.
 
Si el PP está o puede hacerse que descienda de las alturas, el PSOE no tiene motor adecuado para correr la carrera, Podemos ya no es más que un mal pinchazo de carreras pasadas, el único que podría, si quisiese, dar el zarpazo que permitiese cumplir el eslogan de "es posible hacer las cosas de otro modo" y hacerlo, es VOX; pero parece que no quiere, con gestos ridículos en la Comunidad de Madrid, falta de imagen de las locales en ningún sitio, disputas internas que nadie explica y que parecieren más de lucros personales que de ideología, estrategia o liderazgo.
 
España necesita un cambio y ese sólo puede pasar por un centro derecha democrático sólido, coherente, que cumpla su palabra, que regenere la política y que permita la trasformación de una democracia paupérrima en una democracia moderna, controladora y sólida en la que el respeto al adversario sea la regla y el control al poder la consigna, sin miedo, sin melindrosas posiciones y con la conciencia clara de que las posiciones éticas no son de una marca, sino de las personas, y que las leyes ideológicas deben de ser derogadas sin miedo, ni vergüenza, dejando en evidencia al que las dictó en pos de un interés espurio.