El Parlamento de Portugal ha aprobado este jueves su tercer estado de emergencia decretado para hacer frente a la pandemia del Covid-19, hasta el 2 de mayo, fecha para la que el primer ministro, Antonio Costa, planea ir reabriendo algunos sectores de la economía de manera lenta y progresiva.
Costa ha anunciado que el Gobierno está trabajando en una serie de medidas que ayuden al país a convivir con la "amenaza" del virus durante el próximo año o año y medio, hasta que se halle una vacuna.
En ese sentido, Costa ha esbozado la reapertura de algunos sectores de la economía portuguesa, otorgando mayor libertad de movimientos a sus ciudadanos, tras la finalización de este tercer estado de emergencia.
Aunque sin avanzar una fecha en concreto, Costa ha hablado de la posibilidad de volver a abrir guarderías, centros de educación primaria, pequeños comercios y algunos servicios públicos.
El objetivo es "revivir la economía, sin dejar que la pandemia se descontrole", ha explicado Costa ante un Parlamento que ha aprobado la propuesta presentada por el presidente del país, Marcelo Rebelo de Sousa.
Así, ha salido adelante con los apoyos del Partido Socialista (PS) de Costa, Partido Social Demócrata (PSD), Bloque de Izquierda (BE), CDS-Partido Popular y el partido Personas-Animales-Naturaleza (PAN).
En esta ocasión, al igual que Iniciativa Liberal (IL), el Partido Comunista (PCP) ha decidido votar en contra, tras las dos abstenciones anteriores, ha explicado el diario portugués 'Público'.
El líder de la bancada del PCP, Joao Oliveira, ha justificado la negativa explicando que la decisión del Gobierno es "innecesaria y desproporcional", pues amparándose en la lucha contra el Covid-19 continúan "los abusos, las arbitrariedades y las violaciones de los derechos de los trabajadores" en favor de los grupos económicos.
Se trata del tercer estado de emergencia decretado por Portugal desde que aquel lanzado el 18 de marzo para hacer frente a la pandemia del Covid-19.
Portugal es uno de los países, en comparación con los de su entorno, que menos ha padecido los estragos de la pandemia. De acuerdo con las últimas cifras, se han registrado 18.841 casos positivos y 629 víctimas mortales, números muy alejados de los de España, Francia o Italia.