La ‘nueva normalidad’ estará marcada por los viajes de proximidad y por fórmulas que contemplen pocos riesgos de contagios. El turismo rural será uno de los grandes beneficiados en la era post Covid-19. Y es que la proximidad y la facilidad de acceso a estos destinos a los que se puede llegar en coche propio son sus principales bazas. La oferta de alojamiento es muy amplia en Trás-os-Montes y el Duero, lo que permite optar entre una gran diversidad.

Entre esos destinos se encuentra una visita a Torre de Moncorvo y sus aldeas, donde siempre es ir al encuentro de rincones subyugantes que hablan de una profunda historia por la que pasaron diversos pueblos y que, entre unos y los otros, hicieron de este territorio bañado por los ríos Duero y Sabor, un lugar que, al margen de estar incluido en la gran ruta del Duero y en el Alto Douro Vinhateiro, entraña emociones, arte, diferencia y, en la mayoría de las ocasiones, un patrimonio edificado, y natural, que aún conserva su autenticidad más rancia. Dispersos por el municipio se encuentran iglesias, construcciones civiles, museos... que hacen del viaje todo un hallazgo de historia y arte. La propia historia de Portugal. Torre de Moncorvo, un concejo que desde épocas milenarias ha servido de escenario al desarrollo de esa historia y que vive hoy sobre el signo de un pasado marcado por el recuerdo y con un futuro que se desea fructífero.



Por aquí pasaron pueblos -de cuya existencia hablan las piedras- que dejaron un poco de su pasado por todas partes, marcas inconfundibles de sus civilizaciones, que resistieron al tiempo, labradas en la piedra o en la palabra. Torre de Moncorvo forma parte de la historia de Portugal y ésta ha dejado su impronta en el concejo. Su amplio patrimonio histórico y arqueológico da testimonio de esos pueblos que por aquí pasaron y habitaron.



Comienza este viaje en el mismo centro de Moncorvo, en la Oficina de Turismo y se desarrolla dentro del casco histórico de la villa, donde están situados los monumentos de incalculable valor artístico, que, incluso, se podrían considerar la mayor parte de ellos como inmuebles de interés público y la Iglesia Matriz, Monumento Nacional. Todo este vasto patrimonio se data entre el siglo XIV y el siglo XVIII.

El castillo de Torre de Moncorvo

La fortificación medieval de Torre de Moncorvo fue delimitada por D. Dinis, hacia 1295, constituida, seguramente, por un cerco amurallado, en cuyo espacio interior se localizaba la nueva villa. Posteriormente, en el siglo XIV, fue construido el castillo, situado en la zona sur y con dos torres. De todo este conjunto arquitectónico, aún se localizan algunos tramos de muralla medieval (siglos XIII-XIV).



Además, puede observarse una de las puertas, conocida como 'Puerta de la Tradición', como también las almenas y el adarve. En estos momentos en el lugar, que se encuentra presidido por el edificio de la Cámara Municipal -data del siglo XIX, construido después de la destrucción de las torres del castillo-, se realizan unas importantes excavaciones que están dejando a la luz los interiores del castillo medieval.

Casa de la Rueda, o de los Expósitos

El segundo edificio que levanta la curiosidad del viajero es la conocida como Casa de la Rueda. Una casa típicamente rural transmontana en cuyo fachada exterior se encuentra una pequeña ventana con una rueda de madera, que data de 1785. Durante el siglo XVIII eran depositados en estaca casa los niños 'expósitos' o abandonados por sus padres, dejados en la rueda de la ventana sin saberse nunca de quién eran. De esa forma, a los pequeños se les garantizaba el crecimiento. En esta interesante casa se encuentra el Núcleo Museístico de la Casa de la Rueda que muestra la historia y todos los procedimientos y útiles que en la misma se realizaban en la antigüedad.



Capilla del Sagrado Corazón de Jesús



En el mismo entorno del castillo y en la parte trasera de la Cámara Municipal se encuentra la capilla del Sagrado Corazón de Jesús, de estilo barroco datada en el siglo XVII. Esta capilla, que en su tiempo perteneció a la familia Vasconcelos y estuvo situada en el complejo palaciego de esta familia, está catalogada como Edidificio de Interés Público. La fachada posee en su centro el Sagrado Corazón de Jesús y un ojo con moldura en forma de cruz griega. En su interior se encuentran bienes eclesiásticos de interés sacro.

Iglesia de la Misericordia | Museo de Arte Sacro de Moncorvo



Fundada y de estilo característico del siglo XVI portugués, posee una bella fachada renacentista, embellecida por dos medallones de San Pedro y San Pablo. En su parte superior se halla un nicho con la imagen de Nuestra Señora del Amparo. Su interior, de una sola nave, destaca un retablo de de talla dorada barroca (Estilo Nacional), así como un púlpito renacentista tallado en granito en forma de cáliz. 



El Museo de Arte Sacro alberga piezas de gran interés artístico, junto a obras de arte que pertenecen a la Iglesia Parroquial y a la propia iglesia de la Misericordia. Cálices, custodias, casullas, crucifijos, tallas de santos, capas pluviales...



Puerta de la Villa y capilla de Nuestra Señora de los Remedios



Capilla que se asienta sobre la única puerta existente de la antigua muralla medieval de la villa de Torre de Moncorvo, siendo construida en el siglo XVII. De las antiguas murallas medievales se conserva esta puerta, teniendo en el interior del arco unas siglas cruciformes y una alfabética.



En este conjunto de capillas y ermitas, diferenciadas por sus fachadas características, destacan la Capilla de Nuestra Señora de los Placeres, de estilo barroco, siglo XVIII, con frontal triangular y blasón familiar. Al igual que la capilla del Espíritu Santo y Antiguo Hospital, constituyendo un conjunto arquitectónico. La fundación del hospital se remonta al siglo XVI, estando en funcionamiento hasta entrado el siglo XX. Mientras que la capilla, del siglo XVIII, presenta en las fachada las armas de D. Manuel I. Capilla de San Antonio, de propiedad privada de la familia Carvalho y Castro, se remonta al siglo XVII, con el blasón de armas familiar en la fachada. En este mismo lugar se encuentra el conocido 'chafariz' o fuente de Santo Antonio, que data del siglo XVI, con antiguo escudo municipal. La fecha de 1704 debe corresponder a una restauración posterior.

Regresamos al centro de la villa, tras dejar atrás la antigua judería de la que aún restan algunas viviendas y el trazado de sus calles, para visitar la Iglesia Parroquial de Torre de Moncorvo, con la categoría de Monumento Nacional. Su construcción, de granito y compacta con contrafuertes y enormes gárgolas, comenzó en la primera mitada del siglo XVI, prolongándose hasta los primeros años del siglo XVII. En su fachada principal destaca la torre que transmite un acentuado sentido de elegancia al edificio, y su bello pórtico renacentista. El interior se encuentra organizado siguiendo el esquema de las 'iglesias-salón' con tres naves, siendo los cinco techos de estas naves abobedados a la misma altura. Puede considerarse como la mayor iglesia de Trás-os-Montes, mostrando la austeridad religiosa de los años del Concilio de Trento.

En la capilla mayor se puede admirar un grandioso retablo de talla barroca del maestro Jacinto da Silva, que lo construyó en 1752 y 1754, con dos columnas salomónicas. Posee diversas capillas con interesantes tallas y retablos, tanto de 'estilo nacional' como rococó o manierista, en madera. Su visión desde el coro es espectacular, además de obligada visita para conocer todos los estilos imaginados del arte portugués.



En la plaza de la villa, junto al castillo, se encuentra la Fuente Filipina, construida en 1936, durante la dinastía Felipina. Fue destruida a finales del siglo XIX. En 1999 fue restaurada y repuesta en el centro de la plaza Francisco Meireles.



Museo del Hierro y de la Región de Moncorvo



Este interesante y único museo de Portugal, que explica la reciente historia de Moncorvo y su concejo con las minas de hierro, se encuentra ubicado en el solar del Barón de Palme, siglo XVIII. Se trata de un edificio de trazado simple, con escalera y balconada exterior. Aquí nació y vivió también António Balbino Rego, médico y autor de varios estudios en su especialidad. El Museo del Hierro busca la promoción, el conocimiento y la divulgación del patrimonio arqueológico e industrial del concejo, con especial enfoque a las actividades relacionadas con la explotación del hierro y, sobre todo, cómo se aprovechaba el hierro que se extraía de los montes del concejo de Moncorvo.



Un paseo por el concejo de Moncorvo



El conjunto de freguesías del concejo de Moncorvo también poseen una amplia oferta arquitectónica, tanto religiosa como civil. Es el caso de la capilla de Nuestra Señora de la Teixeira, o como el Lagar de la Cera de Felgueiras. También se pueden visitar la iglesia de Adeganha, la Fuente de Gil, o la fuente románica de Mós.

En cuanto a los centros históricos y rurales, merecen interés etnográfico el de Urros, Adeganha, Maçores y Mós, tanto por el trazado de los mismos, como por esas construcciones rurales de piedra de granito, tan características de las aldeas transmontanas o, de otra parte, las aldeas más cercanas al Duero, con su característica fluvial.



Y regresamos a Torre de Moncorvo por donde hemos venido... La villa nos espera cuando el sol parece desplomarse, con sus tonos rojizos que levantan el rizo en estos inicios de verano, por los acordeones que se abren y cierran en las ondulaciones del horizonte. El Duero culebrea entre montes, fallas y bancales, y nosotros tomamos asiento para degustar una cena que no nos puede dejar indiferentes con productos de la tierra como el cordero autóctono, los peces de río y las almendras cubiertas. Porque Moncorvo y su concejo es susceptible de poder visitar más patrimonio, como quien dice escondido al gran público y perdido entre estos vastos territorios. El viajero aconseja contactar con la Oficina de Turismo para programar visitas y acceder al interior de las iglesias. 

Tal y como aseguran varias fuentes del sector turístico, el turista (una vez des-escalado el confinamiento) apostará por viajes con estancias más cortas, con acceso en vehículo privado y por destinos más próximos a su residencia habitual. Es por eso, que los alojamientos rurales aislados de grandes aglomeraciones serán percibidos como la opción preferencial para realizar los primeros viajes después de la crisis sanitaria del COVID-19. Y Torre de Moncorvo y su concejo, como Trás-os-Montes y el Duero, son una gran alternativa.

PASEO FOTOGRÁFICO POR EL PATRIMONIO HISTÓRICO DE MONCORVO