Las visitas a Las Lagunas de Villafáfila se disparan un 6,4%
El Patronato de la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, reunido esta mañana en las oficinas de la Casa del Parque en Villafáfila bajo la presidencia del delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, ha conocido el informe sobre la gestión de la Reserva Natural en el año 2016.
El delegado territorial ha indicado que “la Casa del Parque recibió un total de 18.133 visitantes en el año 2016, lo que supone un aumento del 6,4 % respecto al año anterior. El mayor número de visitas se produjo entre los meses de diciembre a mayo, concentrándose en estos seis meses el 75 % de los visitantes. En cuanto a las visitas de grupo, la Casa del Parque recibió 60 grupos concertados, un total de 2.685 personas, que realizaron la visita guiada acompañados por monitores de la Casa. Los escolares y los amantes de la ornitología son los colectivos que más se acercan a la Casa del Parque para a conocer el entorno natural de las Lagunas de Villafáfila”.
Alberto Castro ha explicado que “la mayoría de los visitantes, un 64 % del total, proceden de las diferentes provincias de Castilla y León. La segunda comunidad que aporta más personas es Madrid, con el 14 %, seguida de Galicia con el 4,8 % y el País Vasco con el 3,9 %. Asimismo durante el año pasado, el número de visitantes extranjeros sumó 495 personas de 26 nacionalidades diferentes, lo que supone un ligero aumento respecto al año anterior. Habitualmente estos visitantes extranjeros son expertos en cuestiones ornitológicas que permanecen en la zona durante varios días, ocupando los primeros lugares Francia y Portugal con el 50 % de los visitantes extranjeros”.
Por otra parte, la Casa del Parque continúa ofreciendo talleres, rutas guiadas, exposiciones y jornadas de voluntariado ambiental dedicadas al anillamiento científico de aves. Actividad, esta última, de gran interés entre el público en general.
A lo largo del año la Junta de Castilla y León ha realizado en la Reserva diversas labores para la conservación y el uso público de este espacio natural, como el desbroce de áreas recreativas, la reposición de señalización o el arreglo de la parada de autobús en San Agustín y Tapioles.
Además, con carácter mensual se han realizado censos de las aves presentes en las Lagunas y muestreos de nidos en la época de reproducción, con el fin de conocer el número de especies y la cantidad de aves que se reproducen en la Reserva. De esta forma, el ánsar común es la especie más emblemática de las Lagunas y la que atrae un mayor número de visitantes.
Respecto a la Junta Consultiva de la Reserva de las Lagunas de Villafáfila, los miembros han abordado esta mañana, entre otros asuntos, el desarrollo de la actividad cinegética en este espacio natural, informando de la evolución de las principales especies cinegéticas y las capturas durante la temporada de caza.
Otro de los puntos tratados en la Junta Consultiva ha sido las indemnizaciones por los daños provocados por las especies cinegéticas en la Reserva. El pasado año se concedieron indemnizaciones por daños en 54 parcelas agrícolas cuyo importe ascendió a 23.466 euros, de los que 20.843 euros fueron daños producidos por el conejo, el 89 %. El conejo sigue siendo la especie que más daños provoca en los terrenos agrícolas de los pueblos situados en la Reserva, aunque se ha logrado una tendencia a la estabilidad de su población, se continúa concediendo permisos especiales para su captura.
En el caso de la avutarda, se ha informado del nuevo sistema de abono establecido con el fin de agilizar los pagos compensatorios derivados de los daños producidos por la avutarda en las fincas comprendidas dentro de los límites de la Reserva Natural de Villafáfila, que fue publicado el pasado mes de diciembre.
Finalmente señalar que, en cuanto a la evolución de las especies, los ánsares han llegado más tarde de lo habitual como viene sucediendo los últimos años, lo que parece indicar un claro cambio en los hábitos de invernada de la especie. En cuanto a los patos, se contabilizaron 1.282 en enero de 2017, una cifra muy inferior a la media del periodo 1997-2016, pero que se puede considerar normal debido a que la mayor parte de las lagunas estaban secas por la falta de lluvias.