Muy difícil ven en UGT el futuro de la minería del carbón a partir del año 2019, así lo manifestó esta mañana el responsable de minería del sindicato Vítor Fernández. Si no se produce un milagro, las minas no serán operativas de forma inmediata. En cualquier caso, la supervivencia de la minería del carbón pasaría porque las eléctricas elevasen la compra de este mineral hasta los cinco millones de toneladas al año y porque la producción de energía eléctrica por la quema de carbón se estabilizase en el 5% del mix, actualmente está en el 1,8%, que representa el resto de las fuentes energéticas.

El líder de UGT también ha pedido, sobre todo, al Gobierno central, ya que desde la Junta se hace todo lo posible, aunque en Madrid no les escuchan, que se cumplan todos los acuerdos de los últimos años con el carbón. Fernñandez ha recordado que los gobiernos de Aznar cumplieron toos los acuerdos y que Zapatero lo hizo hasta octubre de 2010; a partir de esa fecha, ningún Gobierno ha cumplido lo pactado con los sindicatos y con la patronal.

La otra demanda de los sindicatos es la reactivación social y económica de la cuencas mineras, porque "el carbón se acaba" y hay que dar una solución a la economía de las cuencas y, sobre todo, a los mineros y a sus familias.

Datos estremecedores

Los datos del declive de la minería del carbón, aunque conocidos no dejan e ser estremecedores: En 2011, la producción de carbón nacional era de 6,6 millones de toneladas, en el 2016 fue de 1,7 millones; el carbón importado en 20111 era de 16 millones de toneladas, en el 2106 fue de 14,6 millones; en 2010 había 21 empresas mineras, en 2017 quedan sólo 10 y casi todas ellas sin actividad; en 2011 había 5.800 mineros, aproximadamente, en el 20016, unos 2.000; y en 2011 las ayudas del Estado a la minería fueron de 301 millones de euros y en 2016, 25,7 millones.

Las conclusiones de UGT son tajantes: "Castilla y León ya no tiene minería del carbón", "el Gobierno no ejecuta ni paga los pactos de años atrás", "sin el carbón nacional, las térmicas de interior cerrarán" y "la responsabilidad del cierre de las minas no es de Europa sino de los estados".

Este es el negro panorama con el que el próximo día 13 de marzo los sindicatos se van a sentar en una nueva ronda de negociaciones con el Ministerio de Industria. No prevén avances, entre otros motivos porque aún no se han aprobado los presupuestos generales del Estado y porque el actual Gobierno no cree en el carbón.