El Beato de Tábara, "la joya medieval", vuelve a casa

¡Bienvenido! El Beato de Tábara vuelve a casa (970-2017). Estas palabras están presentes durante todo el día de hoy en las pancartas que adornan la iglesia de Santa María de Tábara. La ciudad, los vecinos y el propio templo se han puesto de gala para recibir al famoso códice que da nombre a la localidad y que ha vuelto a casa más de un siglo después.

El Beato de Tábara volvía a su casa este sábado para que la provincia de Zamora pueda observarlo durante unos minutos. Extremadamente cuidado y con unas importantes medidas de seguridad, el Beato llegaba antes de las once de la mañana a la iglesia de Santa María para exponerse al público. Tras ello, vecinos de la propia localidad y provincia se desplazaban hasta el municipio para ver el beato, su beato, "algo histórico", como comentaban algunas vecinas del municipio.

Así, esta joya medieval ejemplo del gran 'Scriptorium' que hubo en el monasterio zamorano, ha regresado a casa con motivo de las jornadas de Tábara que comenzaron ayer y que son el colofón al 150 aniversario de la fundación del Archivo Histórico Nacional, además de celebrarse la conmemoración de la inscripción de los beatos de la Península Ibérica en el Registro de la Memoria del Mundo.

Lo más llamativo, sin duda, su icónica torre. Y es que, el Beato de Tábara, "el beato más querido por los investigadores" es un códice medieval datado en el siglo X con unas características especiales y detalles únicos. Todo ello recuperado de un monasterio que a día de hoy no se ha podido identificar.

De este modo, el alcalde de Tábara ha resaltado la figura de John Williams, experto mundial en códices que estudió detalladamente el Beato de Tábara y cuyas cenizas reposan en la misma iglesia de la localidad en la que este sábado se expone el códice. Una pieza con un "valor incalculable", además de cultural y patrimonial, que hoy está pudiendo ser vista por toda la provincia, su provincia, y sin duda, un acto que se recordará por mucho tiempo. ¡Bienvenido, Beato de Tábara!.