Tras las vacaciones de Semana Santa, la delegada del Gobierno, María José Salgueiro, ha asegurado que no existe relajación de las administraciones en materia de seguridad del tráfico, aunque haya aumentado el número de fallecidos en carreteras de la Comunidad en Semana Santa --un muerto más-- y ha advertido del incremento del tránsito de vehículos los dos próximos fines de semana.

Salgueiro se ha expresado así momentos antes de presidir el Consejo Autonómico de Seguridad Ciudadana de Castilla y León, que se ha reunido este martes y que ha asegurado que pretende que celebre un encuentro anual.

En este contexto, en respuesta a las preguntas de los periodistas, la delegada del Gobierno ha atribuido el posible incremento de accidentes de tráfico al aumento del movimiento de vehículos y no cree que se haya relajado nadie.

Salgueiro ha explicado que los datos provisionales indican que se ha producido un fallecimiento y un accidente mortal más que en la Semana Santa del pasado año, es decir, cinco frente a los cuatro del pasado ejercicio, y ha afirmado que cualquier accidente siempre es "horrible".

Por ello, ha llamado a la precaución, sobre todo en los dos próximos fines de semana, en los que coinciden sendos puentes, el de Villalar y el del 1 de Mayo (son festivos el 24 de abril y el 2 de mayo).

A este respecto, ha señalado que la mayoría de los accidentes de tráfico se producen en vías convencionales, que en el caso de Castilla y León son el 70 por ciento, y las causas fundamentales son las distracciones y el exceso de velocidad, cuestión esta última que se controla a lo largo de estos días en una campaña especial de la Dirección General de Tráfico.

Precisamente la delegada del Gobierno ha aclarado que estas campañas no se hace "por rutina", con afán de "control" o "recaudatorio", sino para proteger a los ciudadanos y ha recordado que más de 200 menores no llevaban adecuadamente puesto el sistema de retención infantil, según se detectó en la última campaña desarrollada del 13 al 19 de marzo.

Consejo de Seguridad

María José Salgueiro se ha expresado así en el marco del Consejo Autonómico de Seguridad, que ha explicado que hacía mucho que no se reunía (se creó en 2006) y que pretende hacerlo al menos una vez al año.

Se trata de un consejo asesor y consultivo regional de coordinación de la Delegación y sus servicios con las diferentes administraciones, organismos y asociaciones representativas de la sociedad y en el que participan desde Fuerzas y Seguridad del estado a los diferentes servicios de la Administración del Estado, la Junta, la federación Regional de Municipios y Provincias, Tribunal Superior de Justicia, Fiscalía, sindicatos, vecinos, centros educativos, etcétera.

El Consejo tiene una doble función, ya que por un lado pretende transmitir la información precisa en materia de seguridad ciudadana a los representantes de otras administraciones y colectivos sociales directamente afectados y, por otro, recoger y canalizar las peticiones, sugerencias y experiencias en esta materia por las instituciones, organismos y asociaciones representadas.

La delegada ha aclarado que se tratan diferentes cuestiones generales, ya que para cuestiones más puntuales se convocan las juntas locales de seguridad como en el caso de la celebración del Día de la Comunidad en Villalar, por ejemplo.

Entre las preocupaciones que se abordan en esta reunión está la seguridad, que nunca está garantizada "al cien por cien", aunque la delegada ha recordado que Castilla y León tiene un buen nivel en esta materia.

En concreto, ha señalado que en Castilla y León se produjeron 72.000 infracciones en 2016, un porcentaje pequeño sobre los dos millones registrados a nivel nacional, y la tasa se sitúa en 42 por cada 1.000 habitantes frente a las 29 en la Comunidad.

"Es una Comunidad segura", ha señalado Salgueiro, quien ha recordado que en 2016 la tasa de delincuencia bajó un 3 por ciento con respecto al año anterior, en un 95 por ciento gracias a la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.